El Gobierno apela a la victimización. El premier Gustavo Adrianzén salió ayer en defensa de la presidenta Dina Boluarte para responder a la Fiscalía por la reciente formulación de una denuncia constitucional en contra de la jefa de Estado por el caso Rolex.
Desde el Parlamento a donde fue para sustentar un pedido de facultades legislativas, el primer ministro aseguró que Boluarte es víctima de una persecución fiscal por la reciente decisión del Ministerio, ante lo cual mostró su rechazo y aseguró que es intolerable.
“La señora presidenta está siendo víctima de una persecución que tiene como base la Fiscalía de la Nación. Es intolerable (esa denuncia), es una persecución que denunciamos aquí y confiamos que el poder legislativo no dejará pasar por alto, esto merece un rechazo”, manifestó.
Agregó que son cuatro únicos supuestos en los que una presidenta de la República puede ser investigada, los cuales están consignados en el artículo 117 de la Constitución Política. Sin embargo, lo que se aprecia en dicho artículo es que se puede formular una acusación -entre otras- por traición a la patria, impedir elecciones presidenciales o disolver el Parlamento.
APRECIACIÓN
Calificó a todo el hecho de ser un exceso que mella la figura presidencial.
De otro lado, recordó que hace unos días la defensa de la presidenta pidió el control de plazos en el citado caso Rolex, pero que “como respuesta” se formuló una denuncia constitucional a lo cual calificó de persecución. “Confiamos que el primer poder del Estado del Poder Legislativo no va a dejar pasar por alto”, añadió.
En esa línea, indicó que existe un sector del Parlamento que intenta golpear la figura presidencial al recordar que hace unos días se presentó tres mociones de vacancia. “Es insólito. Nunca antes visto en el parlamentarismo peruano”