El Síndrome de Guillain-Barré es una enfermedad autoinmune, que afecta el sistema nervioso de las personas y se manifiesta a través de debilidad muscular, hormigueo y, en casos graves, parálisis.
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La enfermera del Hospital Víctor Lazarte EsSalud, María Espinoza Llerena, explica que “normalmente nuestro sistema inmunológico, encargado de protegernos de atacantes externos, puede afectar los nervios de una persona y origina el síndrome de Guillain-barré, lo que resulta en la deterioración de la vaina de mielina y una respuesta inadecuada del cerebro”.
Si bien el síndrome de Guillain-Barré puede afectar a personas de todas las edades, hay grupos especialmente vulnerables, como los niños, adultos jóvenes y los adultos mayores, debido a la presencia de comorbilidades y otras patologías que pueden exacerbar la enfermedad.
“Es importante observar si los adultos mayores presentan cambios en su marcha o debilidad en sus músculos, y debemos estar igualmente alertas en el caso de los niños y otros grupos etarios”, expresó Espinoza LLerena.
La sintomatología del Síndrome de Guillain-Barré es variada, comenzando con debilidad en los miembros inferiores la cual va ascendiéndo pudiendo afectar también a los músculos respiratorios. En casos graves, muchas personas requieren ventilación asistida. Algunas personas también reportan hormigueo en la cara como síntoma inicial.
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“No se debe automedicar, el tratamiento apropiado en los hospitales nivel III consiste en un trabajo multidisciplinario siendo alguna de las alternativas la plasmaféresis o la administración de inmunoglobulinas, dependerá de la evaluación médica, ya que estos procedimientos o medicamentos ayudan a controlar la enfermedad”, resaltó.
En caso de detectar síntomas del Síndrome de Guillain-Barré, es crucial acudir a un establecimiento de salud
. “La identificación temprana de los síntomas es valiosísima”, señala María Espinoza Llerena. Aunque la causa exacta del síndrome no se ha determinado, estudios indican que muchas personas han experimentado algún proceso infeccioso respiratorio o digestivo en los 15 a 21 días previos al desarrollo de la enfermedad.
Por último, se recomienda lavar frutas y verduras antes de consumirlas, y en general, tener en cuenta una adecuada cocción de las carnes especialmente de aves, y mantener una adecuada higiene de manos como regla de oro para prevenir todo tipo de enfermedades.
