Tiro al vacío
La desactivación del equipo especial de la Policía que apoyaba al Eficcop pudo tener una motivación de revancha (sabían del operativo que se venía) o por el interés de frustrar la detención de Nicanor Boluarte. En cualquier caso, fue una decisión desesperada y que ahora le ha valido una nueva investigación fiscal a la presidenta y al ministro del Interior, Walter Ortiz.
Nervios de punta
La situación en Palacio está bastante tensa, según ha trascendido. A diferencia de otras crisis en la gestión, a la presidenta Boluarte, esta vez, sí se le ha visto bastante nerviosa y con mucho temor. Ni siquiera el escándalo de los Rolex la movió tanto. Con un hermano detenido, no es para menos.
Se la ganaron
Más allá de las pugnas y los bandos detrás del caso “Los Waykis en la Sombra”, la verdad es que la presidenta Dina Boluarte le puso mucho esmero a esta crisis. Se empecinó en negar los actos ilegales de su hermano, lo dejó inmiscuirse en temas de gestión y le dio carta libre para que maneje algunas prefecturas. Si la prensa lo ampayó, ¿no era hora de parar? Fue una necedad no calcular las consecuencias.
Gran favorito
Ahora, a llorar al río. Igual que en algún momento sucedió con Yenifer Paredes, la cuñada/hija de Pedro Castillo, Nicanor Boluarte tiene todos los boletos para irse a una prisión preventiva pero, en su caso, por largo tiempo. Tener a la hermana en Palacio es una razón para fundamentar que su cercanía al poder le permitiría obstruir a la justicia.
Muy alto
Nicanor dio ayer detallados síntomas de su estado de salud y hasta señaló que “me siento mal”. Es una estrategia muy conocida y muy usada por los investigados que no se acuerdan de sus males cuando se trata de cometer actos ilícitos. Según dijo, su glucosa tiene niveles de “400 y más”. Si es así, sufre de diabetes. Una persona saludable debe tener solo un rango de 70-110 en sus niveles de azúcar.
Se quedan
Un inusual pedido de “libertad inmediata” fue negado por el juez Raúl Justiniano para el capitán PNP Jorge Rodríguez, José Luis Castillo, Miguel Ángel Girao, Jorge Luis Palomino y otros investigados en el caso Valkiria XI. Los escritos presentados fueron desestimados y ahora seguirá evaluándose para ellos una posible prisión preventiva.
Jugarreta
Ahora se entiende por qué Darwin Espinoza está tan empecinado en tener su propio partido en Áncash. El Congreso aprobó la otorongada de que los legisladores puedan dejar sus curules para participar en las elecciones municipales y regionales. O sea, podrán hacer campaña con la plata de todos. Espinoza, como se cree el más vivo, ha sido el primero en sacar provecho.
