Carlos Victoria retorna a las tablas con ‘Playlist de Cumpleaños’, una emotiva obra que fue inspirada por una fotografía suya, tomada el 30 de marzo mientras celebraba en soledad su cumpleaños número 69. “Un mes y medio antes había perdido a mi pareja por un cáncer. Comenzó a surgir una obra de acciones con música, en ese entonces lo hicimos por Zoom. Luego, Ronnie Cusó le envía un video a Mario Zannata y él hizo un texto hermoso. Presentamos la obra al Ministerio de Cultura y nos dieron el apoyo económico para ponerla presencial”, narró el actor nacional.
En la puesta teatral, Carlos Victoria interpreta a Don Ezequiel, un hombre de 62 años que perdió al amor de su vida antes de la pandemia. Al aislarse en su departamento, el alzheimer que padece se agrava de manera progresiva.
Al igual que su padre, el recordado actor Enrique Victoria, alza su voz de protesta a favor de los derechos de los artistas en el Perú. Además, reconoce la evidente precariedad de espacios teatrales en el país. “Con la falta de infraestructura que hay en el país, la enorme y terrible carencia de las salas de teatro, a veces tenemos que aceptar los horarios difíciles”, añadió.
Tu personaje en la obra no solo debe lidiar con la pérdida de su pareja, si no también con el alzheimer…
Así es. Mi personaje en la ficción sufre de alzheimer, su pareja fallece y él se queda solo en la casa.
¿Interpretar a Ezequiel fue un escape de lo que viviste en cuarentena?
Indudablemente que sí. Para mí fue una especie de catarsis.
¿Cómo manejas esas emociones?
Tantos años de experiencia que uno sabe manejarlas porque mis experiencias las uso para un personaje pero no dejo que me invada.
Al finalizar la obra diste tu opinión en contra de la ley Tudela…
No solamente mi opinión, si no de ‘Punto y Coma’ y de todos los actores de este país; porque esta señora debería guardar ese proyecto de ley en un cajón porque es un tontería lo que ha hecho. Nos quieren quitar todo tipo de apoyo a nivel cultural en el país. No solo afecta al cine, también al teatro, las artes plásticas y la música.
Con una larga trayectoria como la tuya, ¿qué consejo le darías a los jóvenes actores?
Que sigan su sueño que es lo más importante, que luchen y peleen, que eso es lo más importante del ser humano. Nadie vive tu vida, la vives tú. Trata de vivir de la mejor manera, respetando a los demás y no permitiendo que nadie tumbe tus sueños. Ni los padres, ni la familia, ni nadie.
Leí que debutaste en el teatro a los 18 días de nacido. ¿Cómo ocurrió?
Mis padres trabajaban en una compañía de tartuelas en Buenos Aires y yo nací allá. Mi papá me inscribió en la embajada como hijo de peruano que había nacido en el extranjero. Estaba en la cuna, en el camerino, mientras mis padres trabajaban y en lugar de sacar a un muñeco en el escenario, me sacaron a mí. Cada vez que necesitaban a un niño, me sacaban, hasta que aprendí a caminar y luego a hablar, entonces mi mamá me enseñaba algunos textos. Así fue transcurriendo mi vida.
¿Cuál es el recuerdo más significativo que tienes de tu padre?
Su completa convicción por sus ideales y su lucha constante por el bienestar de los actores peruanos. Su convicción en la lucha por los derechos y su entrega al arte dramático. Era muy divertido verlo preparar un personaje.