Antes de que el partido de Barcelona vs. Almería iniciara, los aficionados blaugranas mostraron su apoyo a Gerard Piqué, con una ovación llena de aplausos y arengas.
Piqué llegó este sábado al Camp Nou en una noche tan especial acompañado por sus dos hijos, Milan y Sasha, quienes siempre han estado muy presentes en los momentos importantes que el defensa ha vivido con el Barcelona. De hecho, ha sido habitual verlos desde bien pequeños en el terreno de juego durante las celebraciones de los títulos.
Y, cuando salió a calentar con el resto de sus compañeros a las 20.32h (CET), recibió al aplauso de los aficionados que en aquel momento ya ocupaban sus asientos en el Camp Nou. Durante el inicio del calentamiento, Piqué estuvo conversando con otro de los capitanes, Sergio Busquets, otra de las piezas clave que irrumpió en el primer equipo en el curso 2008-2009.
Una vez terminado el calentamiento, Piqué se dirigió al banquillo, donde le esperaban Milan y Sasha, y estuvo un rato conversando con ellos. Ambos también estuvieron a su lado en la salida al terreno de juego para disputar el encuentro y formaron parte de la fotografía del equipo.
Por su parte, la grada de animación del Barça mostró dos pancartas en homenaje a Piqué. En una de ellas se pudo leer ‘Gràcies, Geri’ y, en la otra, ‘Un dels nostres’. Además, entonaron el ya célebre cántico de “Piqué, Piqué, Piquenbauer’. Cada vez que Piqué toco el balón fue un motivo para que aplaudieran los 92.605 aficionados que se dieron cita en el Camp Nou.