¿Cómo los peruanos pueden empezar a invertir en acciones de la Bolsa de Valores de Lima?

Una de las mejores opciones para sacarle provecho a nuestros ahorros es a través de la inversión en acciones de las principales empresas peruanas, disponibles en la Bolsa de Valores de Lima. Aunque puede parecer complicado, invertir en la Bolsa es un proceso que no requiere ser un experto en finanzas o inversiones, pero que sí conlleva un grado de preparación para evitar errores y rentabilizar mejor el dinero.

¿Pero por qué invertir en la bolsa? La BVL es una entidad regulada, que brinda liquidez, transparencia y seguridad. Asimismo, ofrece la posibilidad hacer rentable tu dinero.

Solo en los últimos cinco años, el índice S&P/BVL Peru Select, el más representativo de la bolsa, tuvo un rendimiento anualizado en soles de 10.6%, y alcanzó una rentabilidad del 12% en el último año (rentabilidad total anualizado del índice S&P/BVL Peru Select de marzo 2022, en relación a marzo 2021 y 2017), brindando alternativas donde los inversionistas pueden desenvolverse de acuerdo a su perfil de aversión al riesgo y objetivos de inversión.

Sin embargo, al inicio siempre existe el miedo a invertir, sobre todo, cuando se piensa en la posibilidad de perder un dinero que nos costó tanto esfuerzo conseguir. Por ello, la Bolsa de Valores de Lima te brinda seis consejos que debes tener en cuenta si deseas comenzar a invertir de manera exitosa.

1. ¿Invertir en soles o dólares? Es importante que consideres la estabilidad de la moneda que vayas a elegir. Recuerda que el rendimiento y los costos deben ser pagados en la moneda que escojas, asimismo la moneda puede agregar diversificación a tus inversiones.

2. Definir el monto a invertir. Aunque no existe un monto mínimo de inversión, lo recomendable en comenzar con S/ 5,000 como punto de partida. Por ello, cuando una persona comienza a invertir, la BVL le aconseja que utilice un dinero que no tenga planeado utilizar a corto plazo. Es importante identificar a la Sociedad Agente de Bolsa que puede cubrir tus necesidades y que te aporta valor en su contenido de información.

3. Definir tu perfil de inversionista. ¿Conservador, moderado o agresivo? Un inversionista conservador preferirá invertir en instrumentos estables, mientras que un inversionista agresivo elegirá comprar y vender acciones de sectores económicos de mayor volatilidad. Por ello, tu decisión dependerá de diversos factores como tu edad, horizonte de inversión, ingresos, obligaciones financieras, patrimonio, capacidad de ahorro y, sobre todo, tolerancia al riesgo.

4. Elige una Sociedad Agente de Bolsa (SAB). Es importante recordar que BVL no gestiona la compra y venta de acciones. Todas las operaciones se deben realizar por intermedio de una SAB. En el Perú, existen 20 SAB y todas están reguladas y autorizadas por la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV).

5. Garantías, reglas, experiencia y comisiones. Dado que no hay una única tarifa, las comisiones son determinadas por las SAB y aceptadas libremente por los inversionistas. Por ello, una vez que elijas la SAB, debes solicitar esta información

6. Completa la “Ficha de Cliente” con tus datos personales. Luego de llenar esta ficha, tu SAB se encargará de gestionar la apertura de una cuenta electrónica en CAVALI, la entidad encargada de la creación, mantenimiento y desarrollo de la infraestructura del mercado de valores nacional.

Aquí se registrarán los valores en los que invertirás y se te asignará un número de Registro Único del Titular (Código RUT), este código es personal y permanente. Asimismo, a través de la BVL, en la sección de empresas con acciones locales o extranjeras (en caso decidas invertir en valores globales), encontrarás los diversos instrumentos en los que puedes invertir.

Por otro lado, si ya decidiste sobre la compra o la venta de algún valor, deberás enviar una orden a tu SAB por los medios definidos por el representante bursátil. Posterior a los tres días de realizada la operación, CAVALI registrará los valores comprados en tu cuenta (a través de tu código RUT) y en la cuenta matriz de la SAB, donde se registran las acciones.

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