En diálogo con RPP, el presidente de la CONFIEP, Alfonso Bustamante Canny, expresó su desacuerdo con la reciente designación de Alejandro Narváez al frente de Petroperú, calificándola como un “absoluto despropósito”.

Bustamante señaló que el puesto requiere de un perfil técnico en lugar de uno político, y criticó que Narváez, con una trayectoria política de izquierda y cuestionamientos personales, no ofrece la confianza necesaria para liderar la reestructuración de la empresa.

El presidente de CONFIEP pidió al Gobierno rectificar esta decisión, subrayando que incluso dos directores renunciaron tras el nombramiento, lo cual agrava la situación de crisis en la empresa.

“Nos sorprendió mucho la designación de Alejandro Narváez como presidente de Petroperú, puesto que el perfil es un perfil político de una persona, además, marcadamente de izquierda, marcadamente (en) el negacionismo de la situación de Petroperú, que dice que Petroperú tiene un problema solamente de liquidez, cuando realmente lo que sabemos es que se ha convertido en un elefante blanco que está mal financiado”, sostuvo.

Petroperú: Gobierno designó nuevo directorio, pero dos miembros renunciaron antes de asumir el cargo

El último viernes 8 de noviembre, se conoció el nuevo directorio de Petroperú, sin embargo, ya presenta sus dos primeras baja. De acuerdo con El Comercio, Carlos Lezameta y Robert McDonald, miembros del nuevo directorio liderado por Alejandro Narváez, presentaron su renuncia a la empresa estatal.

Como se recuerda, la Junta General de Accionistas de Petro-Perú designó, a través de un Hecho de Importancia a la Superintendencia de Mercado de Valores, el directorio que entró en funciones ayer.

Luego de la salida de McDonald y Lezameta, quedó conformado de esta manera:

  • David Quispe Figueroa - Director No Independiente.
  • César Rodríguez Villanueva - Director Independiente.

Cabe mencionar que Alejandro Narváez ya ocupó la presidencia de Petro-Perú en 2003 y 2005, además, el cargo de Director Ejecutivo de Foncodes. En la actualidad, es Director Gerente de HC Consulting S.A.C y Docente Principal de Economía Financiera en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.

Según Canal N, la renuncia de McDonald parece estar vinculada a la designación de Narváez como presidente del directorio, cuestionado por su historial y afiliaciones políticas.

Asimismo, arrastra señalamientos por una denuncia de hace décadas y críticas respecto a su enfoque ideológico.

Alejandro Narváez asume presidencia de Petroperú en medio de cuestionamientos judiciales

En una reciente junta de accionistas realizada el 7 de noviembre de 2024, Alejandro Narváez Liceras fue designado presidente del directorio de Petroperú.

El nombramiento de Narváez, quien ocupará el cargo como director independiente, ha generado polémica debido a un antecedente judicial de 1973 que cuestiona su idoneidad para liderar la estatal petrolera.

Junto a Narváez, otros cuatro miembros también fueron incorporados al directorio de Petroperú: Robert James Mc Donald Zapff, Carlos Alberto Lezameta Escribens, David Quispe Figueroa y César Rodríguez Villanueva. Al mismo tiempo, se oficializaron las renuncias de Oliver Stark Preuss, Germán Boza Pro y otros miembros que ejercían funciones en el directorio.

Narváez, Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Autónoma de Madrid, cuenta con más de 20 años de experiencia profesional y ha ocupado cargos relevantes en el sector público, incluyendo una presidencia anterior de Petroperú entre 2003 y 2005 y la dirección ejecutiva de FONCODES, donde fue reconocido como Funcionario Público del Año en 2004.

Sin embargo, su historial se ha visto empañado por una denuncia de 1973, cuando tenía 20 años, en la que fue condenado por “violación presunta”.

Cumplió una pena de seis meses de prisión condicional, pero en 2021 el caso resurgió durante una supervisión de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde Narváez ejercía como docente. Aunque fue destituido en un inicio, fue reincorporado por un tecnicismo legal, ya que la acusación ocurrió antes de la promulgación de la Ley 29988.

Narváez ha calificado las acusaciones como “calumnias” y sostiene que el proceso judicial de 1973 fue irregular. Afirma que se le impuso una medida socioeducativa injusta y que continuar señalándolo por un evento de hace cinco décadas sería imponerle una “pena perpetua”.

TE PUEDE INTERESAR


TAGS RELACIONADOS