Ley marco de la reforma del sistema de pensiones tiene más interrogantes que definiciones establecidas, según especialista. (Foto: Andina)
Ley marco de la reforma del sistema de pensiones tiene más interrogantes que definiciones establecidas, según especialista. (Foto: Andina)

Con seis votos a favor y dos en contra, la comisión del Congreso de la República encargada de proponer la reforma del sistema de pensiones, aprobó el pasado martes la Ley Marco de Creación del Sistema Integrado Universal de Pensiones (SIUP).

Este SIUP integrará al Sistema Nacional de Pensiones, al Sistema Privado de Pensiones, Pensión 65 y al programa Contigo. El proyecto dispone que cada afiliado al SIUP tenga una Cuenta Personal Previsional, compuesta por dos subcuentas: una que se rentabilizará en el Fondo de Riesgo Compartido (FRC) y la otra en un Fondo de Riesgo Individual (FRI). Este último será administrado por gestores privados que se elegirán por subasta pública internacional.

¿Es conveniente este sistema para los afiliados? ¿Habrá algún impacto en la rentabilidad de los fondos? Enrique Díaz Ortega, ex superintendente de las AFP y ex superintendente del Mercado de Valores, comentó que se trata de una base de norma que más tiene interrogantes que definiciones establecidas.

Uno de los escollos principales, refirió, es la creación del Órgano Público de Pensiones (OPP), que va a tener la capacidad de discernir cómo elegir a los administradores de los fondos, y bajo qué pautas y reglas. “Es incierto porque no construyes un órgano técnico de esas características de la noche a la mañana. Puedes cometer muchos errores en el camino”, dijo. Añadió que ese periodo inicial de adaptación podría ser perjudicial para el propio afiliado.

Lo otro, apuntó, es suponer de antemano que va a haber una apetito de muchos gestores privados por entrar. Y eso está por verse, porque cualquier gestor, sobre todo los más competentes a nivel internacional, van a mirar cuáles son las reglas de juego, la seguridad que se otorga y el tamaño del mercado al que van a atender, y “nada de eso está garantizado”.

Como comentario general, Díaz, socio fundador de MC&F, afirmó que la transición ha sido muy poco analizada. En esa línea, dijo que nada asegura que de inmediato se logren resultados favorables. En el mejor escenario, cuando haya un actor técnico, y suponiendo que entran los gestores más competentes, el sistema podría tomar un rumbo como el que se tiene ahora, pero advirtió que esa transición puede tomar años.

“Entiendo que a las nuevas generaciones les darán un esquema distinto, pero las generaciones que ya están varios años aportando, debería tener la opción de manejarse de la manera que se han estado manejando, con administradores privados”, refirió.

RIESGO-PAÍS

Arturo García Villacorta, profesor de Finanzas de ESAN Graduate School of Business, cree, por su parte, que esta norma si se aprueba tal como está va a tener un efecto negativo no solamente para el afiliado, sino para el empleo, y la recuperación de la economía. Porque se está hablando que habrá un aporte del empleador, lo que genera un sobrecosto laboral, y puede influir en el tema de remuneraciones.

Por otro lado, dijo que existen experiencias en el país sobre el manejo del Estado en el tema de pensiones y la ONP es una prueba. Opinó que es un factor adicional que podría contribuir a afectar la calificación del riesgo-país, y al afectarse eso va a encarecer los financiamientos, los instrumentos financieros y la rentabilidad.

García anotó que con estos cambios en el sistema previsional, el Estado está interviniendo y aceptando por un lado el derecho de la propiedad privada del ahorro de los trabajadores, y por otro lado, está entrando a administrar un fondo de pensiones que en este caso es de los trabajadores.

“Una entidad estatal va a definir políticas de gestión, incluso de inversión, que puede ser que no sean las más convenientes para los afiliados, relacionados a la rentabilidad de los fondos por un tema de riesgo y diversificación”, puntualizó.

Agregó que siendo un tema tan importante y trascendental, sobre todo en una economía como la peruana, donde hay varios sistemas de pensiones, cabe tener en cuenta que el único que ha tenido resultados buenos y ha mantenido la rentabilidad en tiempos de crisis son los fondos privados de pensiones.