El Ministerio del Ambiente (Minam) anunció el lunes que la Refinería La Pampilla, a cargo de la empresa española Repsol, ha quedado paralizada de realizar operaciones de carga y descarga de hidrocarburos, tras el derrame de petróleo ocurrido en Ventanilla.
Según el titular del sector, Rubén Ramírez, la medida se encuentra sustentada en parte debido a que “no se ha evidenciado acciones claras de limpieza y remediación frente al desastre ocasionado”.
Ramírez también afirmó que Repsol no ha garantizado estar preparado para afrontar un nuevo derrame de hidrocarburos que pudiese ocurrir en sus otras líneas de carga y descarga que operan en el mar peruano.
¿Qué implica esta paralización?
La Resolución N° 00013-2022-OEFA/DSEM establece como medida preventiva que Repsol cumpla con actualizar o modificar el plan de contingencia de la Refinería La Pampilla, en el que considere un mayor dimensionamiento de capacidad de respuesta inmediata ante la ocurrencia de un derrame de hidrocarburos de gran volumen.
Dicha medida será levantada una vez que la empresa presente el cargo del trámite para la modificación o actualización del plan, aprobado por la autoridad competente.
Asimismo, se determina la paralización de operaciones de carga y/o descarga de hidrocarburos u otros productos en los Terminales Multiboyas N° 1, 2 y 3, así como el Terminal Monoboya T-4, en la refinería hasta que presente al Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) un Plan de Gestión ante Derrames de Hidrocarburos en Mar, así como las certificaciones actualizadas de las autoridades competentes que aprueban la integridad de dichas instalaciones.
Esta segunda medida será levantada una vez que la empresa presente el referido plan y las certificaciones actualizadas por las autoridades competentes que garanticen la operatividad de los terminales.
Según la empresa española, la Refinería La Pampilla abastece el 40% del mercado peruano de combustibles, por lo que “realizará los mayores esfuerzos” para evitar el riesgo de desabastecimiento de productos tras la suspensión de operaciones.
La compañía también ha expresado su plena disponibilidad de colaboración con las autoridades peruanas, de modo que puedan reanudar sus actividades lo antes posible.