Para Marilú Martens, ex ministra de Educación, el próximo año nos deparará muchísimos retos. (Foto: GEC)
Para Marilú Martens, ex ministra de Educación, el próximo año nos deparará muchísimos retos. (Foto: GEC)

El año escolar 2020 va cerrando luego de haber enfrentado una serie de desafíos, siendo el principal el hecho de que los alumnos no pudieron asistir físicamente a las aulas por la pandemia. ¿Cuál es el balance del año?

La ex ministra de Educación, Marilú Martens, indicó que si bien este ha sido un año en el que hemos retrocedido en algunos temas, como el de la matrícula, debemos capitalizar los avances y aprendizajes en el marco de la educación a distancia.

“Es imperativo priorizar en la agenda el acceso democrático a Internet en todas las escuelas del Perú, así como las competencias digitales de nuestros docentes. Y, por supuesto, abastecer a todos los locales de agua, para poder retomar el 2021 cumpliendo todas las medidas de bioseguridad”, sostuvo.

Como balance, Martens refirió que es necesario fortalecer las competencias ciudadanas, los valores desde las escuelas, con los profesores, docentes, y todo el personal de educación. Hay una necesidad grande no solo de compartir el propósito sino de aportar al propósito, que es tener un país inclusivo, solidario y próspero, dijo.

¿Qué se espera para el 2021? El ministro de Educación, Ricardo Cuenca, señaló en reciente entrevista con TV Perú que el próximo año lectivo para la educación básica será flexible y dinámico y tendrá tres modalidades: remota, semipresencial y presencial completa.

Para Martens, el próximo año nos deparará muchísimos retos. “Mirando el contexto de que la vacuna aún no va a llegar y hay repunte de contagios, si bien se plantea el regreso presencial a las aulas, lo que queda claro es que el aforo va a tener que reducirse significativamente”.

Señaló que el Minedu debe publicar la norma técnica, que contemple un sistema híbrido, y que debe ir acompañado de todas las medidas de seguridad para las escuelas, con la debida capacitación a los docentes, el acompañamiento a los padres de familia para este nuevo modelo, y una propuesta pedagógica acorde al contexto.

La exministra precisó que no se puede pretender desarrollar 31 competencias, que es lo que manda la currícula escolar. A cambio, debe haber una priorización de estas competencias y una contextualización.

También manifestó su posición respecto a una modernización en la gestión del Minedu para el 2021. “Por ejemplo, el calendario escolar, por qué todo el Perú debe empezar en la misma época del año si las situaciones climáticas son diferentes. Por ejemplo, en la selva llueve justo al inicio del año escolar y esto implica riesgo para los estudiantes y profesores, y hay riesgo que no lleguen los materiales. Debe mirarse una calendarización contextualizada de acuerdo con el clima de nuestro país”, enfatizó.

Otro punto a revisar, según Martens, es el fortalecimiento de la infraestructura de las escuelas en cuanto a todo lo que implique seguridad, baños y ventilación. Lo mismo con las universidades y los institutos, dijo.

HÍBRIDO

Por su parte, Manuel Rodríguez, director de la carrera de educación y gestión del aprendizaje en la UPC, argumentó que tenemos una brecha por cerrar en cuanto a conectividad, ya que “hay zonas rurales donde la falta de conexión a Internet y la falta de acceso a dispositivos, han impedido que el proyecto Aprendo en Casa sea tan eficiente como debe ser, en muchas localidades”.

Mientras que en el sector privado se han abordado de forma distinta los retos que la educación online ha traído, subrayó.

Con respecto al 2021, para el director queda claro que la educación en línea ha venido para quedarse. En esa línea, acotó que hay contenidos que se aprenden mejor en línea que presencial, y viceversa. “En el futuro inmediato, muchas instituciones educativas ya están en esa línea avanzando, y deben concebir sus proyectos educativos con un porcentaje online alto”.

Añadió que otra de las lecciones que la pandemia nos ha mostrado es que “definitivamente en las escuelas se deben enseñar nuevas habilidades, blandas y sociales, las que te llevan a un bienestar socio emocional, para dar espacio al arte, al desarrollo de las personas, y otras habilidades incluso técnicas para dar espacios de salida profesional”.