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Cuatro impactos de bala en la cabeza acabaron con la vida del venezolano Raymond Calderón Rojas (35) al interior del taxi de placa V5I-198 que lo trasladaba de Miraflores hacia el Terminal Terrestre y por las circunstancias en que se produjo su muerte y el lugar de su ejecución, los detectives de Homicidios de la Divincri sospechan que el ataque pudo ser planificado.
Tras la muerte del extranjero certificada a las 19:30 horas por los médicos del Goyeneche, hasta donde fue trasladado Raymond Calderón por su pareja Maryeling R. S. (23) en el auto del taxista Irving Hernández Rincones (21), también de nacionalidad venezolana, los detectives inspeccionaron el vehículo donde encontraron siete casquillos de bala y un impacto en la parte posterior del auto, procediendo a interrogar al conductor y a la pareja del fallecido sobre la ruta que habían hecho.
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De acuerdo con los testimonios recabados, la pareja de venezolanos abordó el taxi de su compatriota en el sector de Alto Misti, Miraflores, para que los trasladara hacia el terminal terrestre pues Raymond debía retornar a Moquegua donde trabajaba como repartidor de productos y alimentos. Según Irving Hernández, lleva trabajando como taxista seis meses y no conoce muy bien las calles de Arequipa.
De Miraflores se dirigió a la Av. La Marina y de allí paso a San Jerónimo para continuar por Los Arrayanes y cuando pasaban por debajo del puente de la variante de Uchumayo, tres sujetos estaban en la calle, dos de ellos les apuntaban con armas de fuego.
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El taxista detuvo el auto pensando que se trataba de un asalto y Raymond le dijo a su pareja que se agachara, luego solo se oyeron los disparos que acabaron con su vida. Los Sicarios fugaron a pie del lugar después de cumplir su objetivo.
La Policía realizó una inspección en el lugar, pero no halló ninguna evidencia del ataque. Lo sospechoso es la ruta que realizó el taxista y que los tiradores sabían el lugar donde esperarlo.
