Paola del Pilar Paredes Calle descubrió su verdadera vocación por la cocina mientras estudiaba Turismo y Hotelería. Ese afán la llevó a abrir su propio emprendimiento de comida marina al que nombró Cevichef. 11 años después, su negocio ha crecido fructíferamente, trayéndole alegrías y ganas de seguir expandiendo la marca aún más. Correo conversó con ella.
¿Cómo nació la idea de abrir una cevichería? Yo estudié Turismo y Hotelería, pero dentro de esa carrera había un curso de gastronomía. Y de ahí nació mi interés por abrir un negocio de comida, y como además me encanta el ceviche decidí empezar por ahí. Abrí primero un local pequeño con cuatro mesas en el que vendía exclusivamente ceviche, yo me hacía cargo junto con otra colaboradora. Era como un pequeño huarique que ganó muchos clientes que luego hicieron que mi negocio se ampliará.
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¿Cuál es la especialidad del negocio? El ceviche de crema de camarón, y como cuando inicié era novedoso y empezó a pegar, me comenzaron a recomendar. Mi negocio siempre estaba lleno y la gente esperaba para poder entrar. Luego abrí un negocio más grande y los clientes empezaron a pedir más cosas, ahí es donde amplío la carta con varios acompañamientos más a base de productos marinos. Comencé a vender chicharrón de pescado, arroz de mariscos, entre otros. Luego lo amplié un poco más, pero siempre me mantuve en José Luis Bustamante y Rivero. Ahora tengo una pequeña sucursal en El Palomar.
¿Dónde se encuentran? El local más grande se encuentra en la urbanización Las Begonias K 1, a la altura de la comisaría de José Luis Bustamante y Rivero. El segundo está dentro del El Palomar, es más pequeño, como le digo yo, “barra cevichera”, porque la carta es más reducida. En el local central tenemos todo tipo de comida marina, atendemos hasta de noche, y nos especializamos preparando makis, además de nuestro plato insignia que es el ceviche de crema de camarón.
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¿Cómo afectó su negocio la pandemia? Como todos los negocios dedicados a la gastronomía, tuvimos que cerrar de un día para otro, tuve que reducir personal y afrontar el encierro de la mejor manera. Con el tiempo adoptamos la modalidad de delivery, la cual mantenemos hasta ahora. Con el tiempo, la mala racha se revirtió y ahora mi local atiende con todas las garantías y es uno de los más solicitados en temas de comida marina.
¿Cuál es tu proyección para el futuro? Yo quiero seguir creciendo. Tengo en la mira abrir un local todavía más grande, en el que se pueda brindar más servicios, como música en vivo. Esto podría suceder el próximo año. Por ahora estamos enfocados en nuestras dos sucursales y en presentar más alternativas de comida fusión, además de los ceviches, durante la noche, lo cual ahora está funcionando muy bien con los makis.