El incremento de la tasa de mortalidad en la región Arequipa a causa del coronavirus generó que cementerios de distritos como Cayma colapsen en Arequipa. Varias familias que no pueden pagar los montos de 500 a 7 mil soles en los otros cementerios de la ciudad, decidieron sepultar al menos 10 cuerpos COVID-19 en el “cementerio clandestino” de la parte alta del distrito de Cayma.
La presidenta de la asociación de Casimiro Cuadros, Isabel Araujo, informó que los dirigentes de diferentes urbanizaciones se unieron para acordar que este espacio sea usado como camposanto, ante la falta de nichos en el camposanto principal.
“Este terreno ya fue destinado como cementerio, pero falta el saneamiento legal y eso puede regularse después. Lo que no puede esperar es el entierro de los cuerpos”, dijo la dirigente.
Desde la Municipalidad de Cayma, a través de un comunicado, informaron que en el año 1015 el Gobierno Regional de Arequipa, destinó el terreno a la municipalidad para construir un cementerio, pero aún falta la independización del área.
“La norma dice que el alcalde debe destinar un espacio para sepultar a los fallecidos por COVID, pero el alcalde no ha dispuesto ningún espacio”, dijo.
Los 10 cadáveres inhumados en este cementerio ubicado en la parte alta del distrito corresponden a un mes, el último cuerpo sepultado fue el domingo.
Dos familias que sepultaron los cuerpos en este camposanto informal, señalaron que no contaban con los recursos para pagar 7 mil soles en el cementerio Apacheta, ni 5 mil soles para Jardines de la Paz. Una de ellas enterró a su hermano que falleció hace unos días.
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Isabel Araujo señaló que eran 67 las hectáreas trasferidas a la municipalidad, de los cuales 11 eran para el cementerio. Sin embargo, de ese total, solo quedarían 38 hectáreas libres, porque fueron invadidas sin el control del Gobierno Regional de Arequipa y la Municipalidad Distrital de Cayma.