Le hicieron frente al enemigo invisible e impredecible llamado coronavirus desde su llegada en marzo de 2020 a la ciudad. De lado quedó la típica capa y un antifaz, los héroes usaron uniformes y mascarillas para dar lucha al antagónico desde diferentes frentes, como la atención médica, seguridad, alimentación, limpieza, entre otros.
De este ejército, 37 de nuestro héroes, fueron reconocidos ayer por la Municipalidad Provincial de Arequipa. Con un diploma de honor y medalla de oro de la ciudad, se buscó destacar su fuerza y voluntad para poner la vida por el bienestar de los demás en su día a día durante esta guerra sin tregua.
Historia de los héroes
Una de ellas es Lili Olivera Choque, jefa de Enfermería del hospital Honorio Delgado. La profesional intentó no quebrarse al recordar el sacrificio e historias conmovedoras que vivió.
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“Teníamos inexperiencia con los equipos de bioseguridad. Era quitarse de manera rápida y cambiarnos. El tiempo se agotaba y la demanda era abrumadora. Algunas enfermeras optamos por usar pañales para atender de forma ininterrumpida durante la emergencia”, confesó.
Familias enteras internadas en el nosocomio y la desesperación ante las constantes muertes son episodios que aún la agobian.
Cuidado familiar
Contraer el virus y contagiar a su familia era el temor de Gregoria Aparicio Ccama, barrendera del área de Limpieza Pública de la comuna provincial. “Mi hija estaba gestando durante los primeros meses de pandemia. Mi temor es causarle daño por hacer mi trabajo. Tenía mucho miedo, pero siempre me encomendaba al señor ¡Por favor, que no nos pase nada! Use mascarillas y guantes. Gracias a Dios no me contagie”, dijo.
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Diez de sus compañeros no corrieron la misma suerte y perecieron durante la pandemia.
Paoli Talledo Salinas, presidente de la Cruz Roja Arequipa, recordó como la demanda de ayuda llegó a un punto donde el horario de ingreso estaba definido, pero el de salida no. La carencia económica en la población se comenzó a percibir a mediados de año.
“Las personas ya no tenían que comer. El 17 de marzo de 2020 empezamos 6 voluntarios ante un panorama incierto. Pudo más el espíritu y las ganas de ayudar”, mencionó.
Alexander Cornejo, periodista radial, al igual que todos los profesionales, reflexionó sobre que la ansiedad estuvo presente cada día. “Pero no podíamos parar. Nuestro trabajo era llevar la información y servir a la población”, manifestó. La batalla continúa para estos trabajadores de primera línea ante un futuro vacilante.