Siete colectivos de voluntarios retiraron el 21 de agosto cinco toneladas de residuos sólidos de la rivera del río Chili, en cinco horas de jornada.
Fueron un total de 53 jóvenes, unos 15 agente de la Marina y del Ejército quienes iniciaron la labor en el puente Grau. La actividad continuó hasta el puente San Martín.
La subgerente de Gestión Ambiental, Kelly Villafuerte, informó que la mayoría de desechos encontrados fueron mascarillas y botellas de plástico. Arbustos y cartones en menor proporción.
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Pobladores dejan sus residuos
La funcionaria advirtió que solo hace 2 meses atrás se realizó la limpieza en la misma zona. “Lamentablemente los vecinos y personas ajenas no comprende el daño que hacen al medio arrojar la basura al río. Varias semanas antes se levantó diez toneladas, en el corto lapso se vuelve a contaminar”, lamentó.
Se utilizaron compactadoras y camiones para trasladar los desechos al botadero Quebrada Honda. Villafuerte recordó a la población que existen sanciones administrativas por parte de la entidad para quienes arrojen basura al río. De identificarse a alguna organización u empresa cometiendo el acto se dará comunicación a la Autoridad Autónoma del Agua y Sedapar, para que se inicie procesos administrativos a los responsables.