En el primer día de levantarse la cuarentena en Arequipa, la ciudad volvió a ser la de antes, con congestión vehicular, aglomeración de personas, presencia de más ambulantes.
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La congestión vehicular por la circulación de más taxis y particulares se registró en el Centro Histórico de la ciudad, pero también avenidas principales de diferentes distritos como José Luis Bustamante y Rivero, Paucarpata, entre otros.
La concentración de personas se observó en algunas calles comerciales donde se encuentran bancos y galerías comerciales como Mercaderes, Peral, San Juan de Dios, Piérola, Perú, Alto de la Luna.
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Los negocios de diferentes rubros abrieron sus puertas, aunque las ventas se redujeron y la afluencia de los pobladores es menor. Sofía es una comerciante de la Galería San Juan de Dios y se encuentra preocupada, porque teme no vender para pagar el alquiler del local.
Los negociantes de otras tiendas apelan a las promociones y descuentos para atraer a más clientes.
La presencia de ambulantes es una desventaja, pero también reconoce que muchos de los comerciantes dejaron las tiendas para convertirse en ambulantes.
Este cambio es uno de los motivos para que un buen porcentaje de los puestos permanezcan cerrados.
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