La alegría por la de la Independencia del Perú, ayer nuevamente llegó a los , donde se aplican las vacunas contra el COVID-19.

Las enfermeras, médicos y técnicas, dejaron por un momento las jeringas, y alegraron a los asistentes, con un jocoso santiago, una danza que precisamente, se baila en el Valle del Mantaro en esta época y que hace un año por la pandemia, ya no se podía celebrar.

Un alto para festejar

Las licenciadas, vestidas con el uniforme turquesa, cogieron los sombreros de colores y realizaron los tradicionales pasos al ritmo de un ajajajay, ajajay.

Asimismo, las jóvenes también bailaron danzan de la selva peruana y la contagiante saya, que terminó con una coreografía donde levantaron los globos y los reventaron frente a los maestros que acudieron a la vacunación.

“Estamos aquí en primera línea, vacunando hasta 14 horas seguidas, inmunizando a la población, para que esté protegida frente al virus y no lleguen a las formas graves de la enfermedad”, dijo la enfermera Madison Avalos Cairampoma, indicando que ayer aplicaron unas mil dosis.

En el vacunatorio del Open Plaza, ayer las brigadas atendieron a cientos de maestros de escuelas y colegios rurales, que acudieron desde temprano para recibir la segunda dosis de la vacuna Sinopharm, ya que muy pronto retornarán a las clases semipresenciales, en las comunidades más lejanas de nuestra región.

El director de la Red Valle del Mantaro, Enrique Porras Orellana, resaltó que la concurrencia ayer fue masiva, durante toda la mañana.

Por la tarde, cuando había menos gente, las enfermeras aprovecharon para darse un momento de descanso bailando, ya que cumplen hasta 12 horas de atención ininterrumpida inmunizando a las personas.

Además, de los docentes que son de la región, también habían profesores que venían de Huancavelica, y que por el feriado de Fiestas Patrias, llegaron hasta la ciudad de Huancayo.