Tres nativos y un colono habrían asesinado con disparos de escopeta a una mujer y dejado heridos a su esposo, su menor hijo y su suegra. La familia era acusada de dedicarse a la brujería.
El hecho sangriento se registró en la comunidad nativa de Onconashari, distrito Raymondi, provincia Atalaya, a las 20:00 horas del jueves.
Según informó a un medio radial de Satipo, Jassira del Águila Ramírez, llegó a la comisaría sectorial pidiendo apoyo luego que su familia fuera atacada. Contó que dieron muerte a su tía Betty Campos (36), quedando heridos el esposo de esta, Fredy Ramírez (38), su hijo de 8 y su suegra. El hecho tuvo lugar en la comunidad nativa de Onconashari.
Tras el ataque, una de las hijas de la finada subió a la altura de un cerro para llamar por celular a su hermana que se encuentra en Huancayo, también le envió fotos. Los familiares piden a las autoridades que se investigue el hecho de sangre y que los autores del atentado sean capturados.
La informante también contó que los asesinos la amenazaron con atentar contra su integridad si es que denunciaba el hecho, aún así se dio el valor de denunciar el caso, y hasta pudo reconocer a dos de los atacantes, cuyas identidades están en reserva.
POR EJERCER LA BRUJERÍA. De las primeras indagaciones se supo que el móvil del crimen sería la práctica de la brujería, una actividad arraigada y muy temida en la Selva Central.
Precisamente, la familia es acusada de practicar la brujería desde que vivía en la localidad de Poyeni, provincia de Satipo (2016), donde también sufrieron ataques y represiones.
En el ataque, el esposo, hijo y suegra de la víctima mortal resultaron con serias lesiones. El caso llegó a instancias de la policía





