Lo encontraron débil y cuando vio a sus compañeros luego de estar 3 días y medio (84 horas) sepultado bajo tierra, las lágrimas recorrían las mejillas del minero Wilder Alarcón Ramos, que fue rescatado de la mina en Cobriza, donde quedó atrapado por el derrumbe de un talud cuando realizaba una excavación con un equipo scaler.
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Los rescatistas lo subieron a una camilla y mientras avanzaban a la ambulancia, los aplausos no se hicieron esperar. Todos estaba con las botas y los trajes llenos de barro, agotados, pero emocionados de ver al compañero con vida.
“Hoy (ayer) a las 5:30 de la mañana, se logró el rescate, Wilder estaba débil sin fuerza, pero su emoción se vio en el lagrimeo de los ojos”, comentó su primo Misael Ramos.
Aquella tarde del último miércoles, se había cumplido la guardia nocturna a las 5 de la tarde, era la hora de salida. Wilder no aparecía, entonces su jefe inmediato regresó y observó el acceso a la mina sepultado. El minero estaba enterrado en una rampa sin salida. Para comprobar que estaba vivo, hacían sonidos y gritaban, cuando Wilder respondió de la misma manera, sus compañeros se organizaron en diversos grupos de rescate, que llegaron para salvar al minero.
“Tratábamos de escuchar su voz y fue grande la alegría cuando escuchamos la respuesta de él, que estaba vivo desde ese momento hemos trabajado con más ganas y sin descanso para evacuar toneladas de tierra”, dijo Misael Ramos Aponte.
Una ventiladora permitió que pudiera respirar. Además por un tubo ingresaron el agua y el alimento que era un preparado especial. Aunque al principio hubo problemas de comunicación.
Los equipos de rescate tenían que hacer una labor de hormiga para evacuar el desmonte, realizar la perforación, instalación de luces y el traslado de materiales.
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Cabe destacar que a los 80 trabajadores destinados por la empresa para rescatar al padre de familia se unieron brigadistas de la unidad Julcani de la Compañía de Minas Buenaventura con la empresa especialista Copsem brigadistas de la compañía minera Volcan Compañía Minera y hasta el Ejercito del Perú.
Apenas fue rescatado, una médico, le brindó los primeros auxilios y fue evacuado en ambulancia hasta Huancayo, en un viaje de unas 6 horas para luego ser internado en una clínica de El Tambo, donde fue atendido por el médico Mendoza que dio como diagnóstico deshidratación severa y transtorno electrolítico.
Los familiares y compañeros estaban contentos y agradecidos, porque lo primordial para ellos era salvarlo y lo lograron. Consideran que es un milagro el rescate, ya que por los días, el lugar y el ambiente donde estaba en algún momento temían lo peor.
La esposa del minero, agradeció el apoyo que tuvo para el rescate del padre de sus 3 hijos que se quedaron en Cobriza.
El rescate del minero Wilder Alarcón Ramos, mantuvo en vilo a todo el país. Autoridades y pobladores de Cobriza, Pampalca, Machahuay, San Pedro de Coris, Carhuancho estuvieron presentes dando el apoyo a sus familiares.
Un helicóptero llegó a la zona para la evacuación aérea, pero la ambulancia ya había partido con el sobreviviente a bordo.