La madrugada de ayer se convirtió en una terrible pesadilla para los pasajeros del bus de placa BTV-095 de la empresa Apocalipsis S.A conducido por Agustín Antonio Ramos, que al cruzar la linea férrea fue impactado en la parte de atrás por un tren de la concesionaria Ferrocarril Central Andino S.A de placa 1017.
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El trágico accidente dejó un saldo de cuatro personas muertas: Ricardina Moscoco Córdova, Víctor Andrés Carlos López, Roberto Esteban Quispe y la enfermera Malena Hinostroza Luis que deja dos huérfanos; y 44 heridas, a muchos los hallamos en la sala de espera del hospital de EsSalud. Según narraron, la unidad partió la noche del sábado de la agencia de Carabayllo en Lima y recogió a más pasajeros en el terminal de Mega Plaza norte y en la agencia de Comas. El accidente ocurrió alrededor de las 4:00 horas en el Km 156 de la Carretera Central en La Oroya, en el sector La Balanza.
Varios pasajeros que estaban despiertos contaron en exclusiva a Correo que se escuchó hasta tres veces el fuerte silbato de la locomotora, le siguió un fuerte estruendo, que hizo volar al bus llevándose la peor parte los que estaban en la parte posterior de la unidad que dio una vuelta de campana hasta quedar en medio de la pista a 1/2 tonel. Los trozos de vidrio salieron como proyectiles hiriendo a los pasajeros en la cara, brazos y piernas . Los gritos y desesperación se apoderaron de ellos.
Varios salieron por sus medios y otros fueron auxiliados por el personal de la Policía de Carreteras de La Oroya y de la Compañía de Bomberos 210 que los llevaron al hospital de EsSalud.
Ayuda mutua
Fredy Alvino Leandro (62) pensionista que viajaba de Lima a Huancayo con su esposa Gladys en los asientos 11 y 12 para estar presentes en el entierro de su hermana, relató que él regresaba del baño cuando escuchó los pitidos del tren.
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“Sentí que chocaba contra el techo y caí al piso, quedé bajo los asientos y vi cerca a una anciana y todos la pisaban aunque ella gritaba por ayuda, me acerque y la ayudé a levantarse y ayudé a mi esposa”, dijo. Su rápida reacción le salvó al vida a Gloria Cárdenas quien pudo morir pisada por los desesperados pasajeros.
Victoria Ambrosio Castillo madre de 52 años, nos cuenta que dormía al momento del accidente cuando salió despedida del asiento 24 del bus. Ella es representante del primer cuartel de su pueblo Huancani y el sábado temprano llego a Lima para vender las zanahorias cosechadas por el barrio y regresaba con más de seis mil soles producto de la venta. Por lo violento del accidente no encontró su bolsa y fue evacuada al hospital.
Demostrando una vez más el infinito amor de madre, María Lazo Ortiz (34) quien trabaja en un restaurant en Lima y que viajaba con su menor hijo Juan Gabriel en los asientos 19 y 20, al sentir que el bus volaba protegió a su menor hijo con su cuerpo para evitar que lo corten los vidrios que volaban. Ella quedó con golpes fuertes y heridas en la mano. Su hijo estaba a su lado ileso, agradecido por el gesto de su madre al protegerlo.
A su turno, Paola Picho Hilaza una joven estudiante de medicina que viajaba en el bus, al ver a las personas heridas trató de atender y dar primeros auxilios a los que lo necesitaban. Una de sus pacientes fue una joven que estaba bañaba en sangre y su madre Yolanda Hilaza Paucar especialista de la Ugel de La Oroya que tenía un fuerte dolor en el pecho. Luego se conoció que tenía una fractura de costilla
