Las obras que carecen de sostenimiento están prácticamente condenadas a la infravaloración, como lo que está sucediendo en el Parque de las Siete Leyendas, que está al este del distrito de El Tambo, donde la tala impiadosa comenzó a afectar los accesos construidos por gestiones anteriores.
Precisamente, a 3,5 kilómetros del anexo de Paccha, taladores provistos con motosierras y camiones han arrasado con una superficie considerable de árboles de eucalipto, destruyendo parcialmente los senderos habilitados por el municipio hace dos años.
Incluso, las plantas que adornaban la trocha han sido cortadas sin misericordia.
Lo peor es que muchos rastrojos han sido abandonados en las vías de acceso, interrumpiendo el tránsito de los visitantes. A eso se suma que algunas barandas colocadas para facilitar el desplazamiento de las personas, han sido destruidas, lo que obliga al turista a sortear atajos peligrosos.
Atractivo turístico
Este bosque, con capacidad de ser declarado como reserva, es un ecosistema de vida vegetal y animal rico y diverso, apto para la práctica sostenida del turismo.
El lugar alberga una complejidad de flora tales como árboles, hierbas, hongos, entre otros; también una enorme cantidad de fauna, especialmente la relacionada con aves.
Las gestiones anteriores, de manera acertada, pusieron en valor este espacio natural. Colocaron señalizaciones y barandas, asimismo construyeron chozas o aposentos para el descanso de los caminantes.
Además, el circuito posee atractivos como la cueva del zorro y el manantial Chicche Puquio, que está al final del recorrido. Todo es espectacular, un deleite para los ojos y el rélax.
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