Del 2020 al 2022 el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (MINJUSDH) transfirió a cinco gobiernos locales de Junín S/900 000 esto en el marco en el marco del Programa de Reparaciones Colectivas, pero no iniciaron los proyectos y otros están paralizados afectando a la población que fue víctima de la violencia política.El MINJUSDH transfirió recursos a gobiernos locales de Mazamari, Pichanaqui, Ulcumayo, Pariahuanca y Coviriali para proyectos relacionados al referido programa, informó la Contraloría General de República.
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La municipalidad de Mazamari en marzo del 2022 recibió 100 mil soles para la creación de módulos de panadería para la Asociación de víctimas desplazados de la violencia política de este distrito y hasta este año, no ha habido ningún reporte de este proyecto.En ese mismo año Pichanaqui recibió el mismo monto para el proyecto de reparación de un badén para el camino vecinal del centro poblado Agua Dulce y no se ha iniciado su ejecución.
Mientras que en enero del 2021 la comuna de Parihuanca recibió 100 mil para la construcción de un letrina publica en el centro poblado Mío Tambo y no hay registro de ningún avance. En junio del 2022 Ulcumayo recibió el mismo monto para el mejoramiento del sistema de agua potable para el caserío de Hualco que tampoco tiene registro.
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En agosto del 2022 Coviriali también recibió 100 mil para la construcción del local multiuso en el centro poblado de Bellavista, que tampoco tiene registro y no se sabe a donde fue a parar el dinero, es decir se habrían malversado casi un millón de soles, pues pese a la CMAN les envió oficios pidiendo la liquidación no han tenido respuesta alguna.
Pero no solo estas comunas serían las que se aprovecharon de los fondos, Río Tambo, Cullhuas y Pariahuanca recibieron fondos que ejecutaron a medias.