Hasta el último jueves, unos 1672 pacientes con COVID-19 fueron dados de alta en los hospitales de la región Junín, pero 272 más en hospitalización general y 49 en la Unidad de Cuidados Intensivos anhelan su recuperación.
En el reporte de la Sala Situacional de la Diresa Junín, se reportan unos 36 mil 398 casos confirmados durante la cuarentena. En un solo día se reportaron 571 nuevos casos, una de las cifras más elevadas que causa preocupación puesto que los contagios no cesan. Además, ya tenemos un acumulado de 1023 fallecidos.
El jefe de Epidemiología de la Diresa Junin, Luis Zúñiga Villacresis, dijo ayer que un 88% de los contagiados ya está de alta. Las hospitalarias son 1672, mientras que las epidemiológicas, son 30 mil 242. Durante su exposición, en la plataforma virtual, el funcionario expresó su preocupación, porque Huancayo en un solo día tiene 335 nuevos contagios.
Picos se reducen
El director adjunto del hospital Carrión, Julio Rosales manifestó que el número de pacientes con el virus, ha disminuido considerablemente. Antes, tuvieron picos de hasta 140 hospitalizados y ahora se redujo a 80.
Asimismo, en emergencia la cantidad de pacientes ha disminuido, ahora llegan a 13. Lo mismo ocurre con las muertes, que están en descenso. No obstante, las camas de UCI, siempre permanecen ocupadas.
Pese a la disminución de casos, los médicos temen que pueda ocurrir un rebrote, cuando se levante la cuarentena. “No queremos volver a vivir lo ocurrido en el mes de julio, que ha sido el mes más duro para nuestra región”, acotó.
El galeno, recordó que el distanciamiento social y el uso de la mascarillas, son las reglas básicas para disminuir los contagios del virus, cuando las personas se desplazan en las calles. No obstante, se ven a personas aglomeradas en bancos y mercados pese a que seguimos con una cuarentena focalizada.
La enfermera Jossy Pérez Beraún mencionó que los contagios también ocurren en los hogares, explicó que muchos ancianos que fueron internados y hasta fallecieron en el hospital Carrión, tenían familiares que repetían que estos no habían salido de casa.
No obstante, no quisieron reconocer que los jóvenes, que sí salieron, son quienes llevaron el virus a su hogar, perjudicando a las personas más vulnerables.
Al respecto, invocó al que sale de casa por trabajo o para realizar compras, que cuando retorne, se laven bien las manos y si es posible que se bañe y se cambie de ropa, para no llevar el virus.