Teobaldo Gustavo Espinoza Tapia, alias “Mita”, y su hijo Álvaro Gustavo Miguel Espinoza Gutiérrez, fueron recluidos en el penal de Potracancha por 18 meses de prisión preventiva desde donde enfrentarán la investigación por supuestamente integrar una banda criminal y haber incurrido en los delitos de receptación y el uso de documento privado público.
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Según la hipótesis del fiscal, la desarticulada banda criminal que operaba desde marzo del 2023, se dedicaba al hurto, receptaciones y clonación de vehículos y el uso de documentación falsificada para una nueva identidad de los vehículos clonados.
Además, le imputan la receptación de una camioneta hurtada y encontrada en su predio, en el caserío de Pacapucro, Churubamba, y haber tenido en su posesión la camioneta del ex gobernador regional Juan Alvarado Cornelio, hurtada de una mecánica, el fiscal le imputa también a Teobaldo ser integrante de la banda.
En junio del 2023 salvó de ser detenido cuando estaba a punto de recibir una motocicleta robada momentos antes. Teobaldo huyó dejando la puerta de su casa abierta y al ingresar los efectivos encontraron en el patio 10 puertas de vehículos, un capote, maletera, entre otros.
La función de Teobaldo, habría sido esconder en su vivienda los vehículos hurtados, donde con la participación de otros sujetos desactivaban los GPS, los desmantelaban y las autopartes eran colocadas en otros vehículos, pero también suplantaban la identidad de las unidades sustraídas, borrando los números de motor y serie para regrabar otros números placas falsificadas y así poder venderlos.
Mientras que a Alvaro Espinoza es investigado por haber receptado la motocicleta de placa 0147 KW, Honda, hurtada en mayo del 2022. Pero la intervención sucedió en setiembre del 2023, cuando él y su padre se movilizaban en dicha moto por el jirón Alfonso Ugarte.
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Los policías que los intervinieron detectaron rápidamente que la placa NM-14447 no le correspondía y que los números de motor y serie eran regrabados. En su defensa, Álvaro dijo que la moto le fue dejado en prenda por la suma de 1700 soles.
Otro hecho que lo compromete es que habría entregado una motocicleta hurtada al primo de su expareja como pago por sus servicios de albañilería. Según el Ministerio Público, la función de Espinoza Gutiérrez en la banda criminal era la de conseguir documentación adulterada de los vehículos clonados que comercializaban.
