Se pasaron de vivos, sembraron y no atendieron las plantas como debió ser, encima cobraron todo
Se pasaron de vivos, sembraron y no atendieron las plantas como debió ser, encima cobraron todo

Un total de 50 191 plantas de sauco y 2 150 de tara se perdieron por la falta de abono y riego .Las plantas fueron sembradas a través del proyecto ambiental que ejecutó el Gobierno Regional de Huánuco en el distrito de San Francisco, provincia de Ambo. La Contraloría General de la República alertó que pesar de la mortandad de estas especies forestadas, los trabajos fueron valorizadas al 100 %.

Según el Informe de Control Concurrente n.° 015-2024-OCI/5339-SCC, este proyecto de reforestación inició en octubre del 2020 con el fin de recuperar la vegetación de las micro cuencas de los ríos Huertas y Huallaga, situadas en las localidades de Quircan, Pulpol, Rodeo y Acochacan.

Las 53 hectáreas de Sauco se perdieron por falta de abono. Según el expediente técnico estas debieron ser fertilizadas a los ocho meses de ser plantadas; sin embargo, la falta de este soporte nutricional a la planta habría ocasionado la mortandad de las 50 191 plantas.

Negligencia y dejadez

Respecto a la tara, se reforestaron 153 hectáreas de esta especie, pero durante la inspección a tres hectáreas, solo se hallaron 16 plantones vivos de tara. La mayor parte de las plantaciones fueron abonadas en el mismo mes que fueron sembradas, cuando el expediente establecía que la aplicación de fertilizantes debió ser a los ocho meses de haber sido sembrado en el campo definitivo.

La Contraloría además, advierte que las plantas recibieron riego de manera parcial, cuando cada hectárea debía recibir riego una vez al mes y durante el primer y segundo año de crecimiento.

El sauco es una especie de planta que ayuda al proceso de regeneración de bosques y la tara apoya en la protección de suelos ante derrumbes en zonas donde no hay agua, la reforestación de estas dos especies tenía como fin recuperar la cobertura vegetal de estas cuencas.

Luego de la inspección en marzo de este año, pudieron advertir que el proyecto no se encuentra culminado, falta ejecutar los trabajos del plan de cierre y seguimiento. En diciembre del 2023 designaron un comité para recibir y liquidar el proyecto; además, a pesar de las deficiencias encontradas, se pagó la última valorización como si los trabajos se hubieran ejecutado al 100%. Los viveros Pulpol y Acochacan no fueron desmontados ni eliminados y se hallaron en proceso de deterioro.

Viveza

En el sistema de seguimiento de inversiones del Ministerios de Economía y Finanzas el proyecto fue registrado con un avance físico y financiero al 97 %. Sin embargo, en el informe de valorización de diciembre del 2023, el residente de la obra informó que el avance físico se encontraba al 93 %, esta situación afecta la transparencia de la gestión, el control social, la supervisión y seguimiento de las obras públicas.

Este proyecto de recuperación de los servicios ambientales se ejecutó por administración directa, su inversión pasó de S/ 3.9 millones a S/ 5 039 749 luego de que el expediente técnico fuera reformulado.

La Contraloría notificó al titular de la entidad para que tome las acciones correctivas que correspondan con la finalidad de asegurar los objetivos del proyecto.

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