En un área descampada de la carretera hacia el distrito de, altura del Cementerio General de Chincha, se encontró el cuerpo sin vida de un hombre que presentaba múltiples lesiones. La policía no descarta que el infortunado fue víctima de atropello y abandonado a su suerte en esta zona, en donde muere sin recibir atención médica. La madre de sus hijas confirmó que se trata de Hamilton Prieto Querebalú.

Hechos

Los transportistas en horas de la madrugada notaron que había un hombre vestido con polo de seguridad, tendido en el suelo, a escasos metros de la vía. Al inicio pensaban que se trataba de un parroquiano, concurrente de las cantinas que están por el área. Pero, al acercarse evidenciaron manchas de sangre por el lado de la cabeza y contusiones en el cuerpo. Debido a ello, el caso fue reportado a la comisaría de Chincha Alta.

Los agentes que se constituyeron al lugar también advirtieron las lesiones que tenía esta persona, quien no respondió ante los reiterados llamados. Y al momento de revisar sus signos vitales, se confirmó que estaba sin vida. La policía solicitó la presencia del fiscal de turno y mientras esperaban llegó una mujer, quien se identificó como la mamá de las hijas del occiso. Ella dijo que el infortunado era Hamilton Prieto.

Diligencias

El fiscal Carlos Saravia de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Chincha y el médico legista acudieron al lugar para comenzar con las diligencias. En ese extremo, se comprobó que el cuerpo tenía fracturas, además de equimosis y lesiones. Para determinar la causa de muerte, se ordenó que el cadáver sea llevado a la morgue, que está ubicada en el distrito de Alto Larán.

En tanto, agentes de la comisaría de Chincha Alta quedaron a cargo de las investigaciones para determinar que ocurrió en este lugar.

Al parecer, Prieto Querebalú fue atropellado por un vehículo todavía no identificado. El chofer no prestó auxilio, se dio a la fuga, dejando al hombre malherido en el descampado. Este padre de familia agonizó sin ser atendido y cuando llegó la ayuda ya no tenía signos de vida.