En la actualidad no quedan muchas personas que lleguen al siglo de vida. Marcelina Guerra Taype es una de esas pocas mujeres que está por cumplir los 100 años. Hoy en el “Día de la Madre”, en su vivienda ubicada al final de la UPIS San Agustín, en Chincha Alta, recibe con los brazos abiertos a sus hijos y nietos que han heredado sus enseñanzas.
Historia de vida
La mujer de 99 años nació en el distrito de Mollepampa (Castrovirreyna-Huancavelica). A los 55 decidió dejar su pueblo natal para enrumbar a Chincha, junto a sus 10 hijos. El destino, le arrebató a cinco de ellos, a quienes recuerda con tristeza.
Marcelina pese a su avanza edad sigue pendiente de sus vástagos. Y es que la llama del amor de madre, nunca se agota. Ella, cuando el tiempo se lo permite acude al Megamercado (Cruz Blanca-Chincha) para acompañar a su hija Dionisia; una comerciante también de la tercera edad de este centro de abastos. La nonagenaria desde un banquito de madera ve que todo marche bien.
“Este 14 de junio mi mamá va a cumplir 100 años”, refiere Dionisia, contenta de tener a su madre cerca para abrazarla y mimarla siempre. Ambas mujeres celebran hoy su día, y en unas semanas más esperan festejar el siglo de vida. Una reunión en familia en la que aflora la costumbre mollepampina, y entre diálogos se recuerda a quienes partieron de este mundo entre ellos: Margarita Taype, la progenitora de Marcelina, quien llegó a vivir 131 años.