Octavio Espinosa tiene un salvador. Se llama Jhon Barriga, el portero que se crece en el arco en la ronda de los penales. Atajó tres disparos y así llevó a su equipo a la final que se jugará este domingo. El portero rojo nuevamente volvió a tener un estupenda tarde. Así maquilló el pobre fútbol que tiene el Espinosa. El Barcelona en la segunda parte fue inmensamente superior. En la primera parte, no lo fue por un mal planteamiento de su entrenador “Machi” Pinillos.
Le regaló el primer tiempo al “Solitario del Sur” que supo aprovechar y sacó la diferencia con un gol de su delantero Miguel Chávez. El Barcelona extrañó a su jugador diferente en la delantera: Menacho. Ayer no estuvo ni en la banca.
El subcampeón de Parcona ayer jugó mal. Le tembló la piernas o simplemente se vio acobardado por el peso de la camiseta del rival. Le faltó fuste para liquidar el campeonato que prometía ser de ellos junto al Cultural 18 de Febrero.
Replanteo de equipo
En la segunda etapa, Pinillos replanteó y sacó a Chuquichay que no trascendió. Los cambios le dieron otro aire al equipo y arrinconó al Espinosa en su campo. Así llegaría el gol de Serafín Anyosa de golpe de cabeza.
En los pies del recién ingresado, Renzo Galindo Morán, el 9 de Barcelona estaba la clasificación. Un centro lo bajó con el pecho y quedó solo frente a Jhon Barriga. Sacó un disparo mortal que se fue por las nubes. Imperdonable. Al mejor cazador se le va la liebre.
Los 90 minutos terminaron a un gol y jugarían el tiempo extra, donde hubo violencia. El DT espinosista César Romano Franco, agredió a un jugador rival.
Espinosa jugará el domingo por el título de la provincia ante el 18 de Febrero, que a primera hora se impuso por 2-0 a Universitario de Los Molinos.
Espinosa deberá reforzarse en todas sus líneas, a excepción de la portería. Volvió a carecer a delanteros eficaces y la defensa ayer tembló con las incursiones del rival.