Moradores del sector Jorge Chávez, en el caserío Fonavi San Martín, enfrentan una crítica situación debido al desabastecimiento de agua potable que persiste desde hace varios días. Ante esta problemática, los vecinos han solicitado la intervención inmediata de las autoridades y la regularización del servicio, ya que se ven obligados a adquirir tanques de agua para suplir sus necesidades básicas, mientras continúan pagando facturas por un suministro que no reciben de forma adecuada.
Reclamo en la zona
“Tenemos que comprar el agua y encima tenemos que pagar todavía”, expresó una residente indignada, quien detalló que el costo promedio del servicio mensual asciende a S/ 26.50. A pesar de los reiterados reclamos ante la empresa abastecedora Emapica, los vecinos no han obtenido respuestas concretas ni una solución efectiva a este problema recurrente que afecta gravemente su calidad de vida.
La compra de agua potable en tanquetas ha significado un gasto adicional considerable para las familias del sector. Cada tanqueta, que cuesta más de S/ 40 y dura aproximadamente una semana, representa una carga económica insostenible, especialmente para los hogares con más integrantes, que necesitan adquirir hasta dos tanquetas semanales. Este gasto extraordinario se suma a la frustración por la falta de un servicio regular que debería garantizarse como un derecho básico.
El problema no es reciente: los vecinos afirman que el desabastecimiento comenzó en julio de 2024 y ha empeorado progresivamente. Incluso cuando llega algo de agua a las viviendas, esta cae mezclada con tierra, lo que la hace inutilizable para consumo humano. “A veces tenemos que comprar bidones de agua solo para que los niños puedan tomar”, declaró otra moradora, subrayando la desesperación que viven muchas familias.
La situación se torna más crítica con la llegada del verano, una temporada de mayor demanda de agua. A esto se suma el riesgo sanitario derivado de la acumulación de agua en recipientes, práctica necesaria para enfrentar el desabastecimiento, pero que puede convertirse en un foco de proliferación del mosquito transmisor del dengue.
En el sector Jorge Chávez, al menos seis familias enfrentan directamente esta problemática, pero el impacto real abarca a muchas más personas en toda la zona, transformando el problema en una crisis alarmante. Los vecinos exigen una solución inmediata para garantizar el acceso a agua potable, un recurso esencial para la salud y el bienestar de la comunidad.