La construcción de la carretera de Cahuachi, un proyecto largamente esperado por los nasqueños sigue siendo incierto a pesar de las numerosas gestiones que han prometido su realización.
Obra pendiente
Esto ha llevado a los pobladores, como el empresario Rafael Verne, a asumir el mantenimiento con sus propios recursos. Verne, dueño del fundo San Martín de Porres, destacó los problemas que enfrentan tanto residentes como turistas para acceder a Cahuachi, además de la creciente acumulación de basura y desmonte en la zona.
Rafael Verne señaló que la falta de infraestructura afecta gravemente el turismo y la calidad de vida de los habitantes. Según él, muchas administraciones han prometido la construcción de la carretera, pero hasta ahora ninguna ha cumplido. “Es lamentable. Tengo 61 años y desde que era niño escucho la promesa de la carretera. Mi padre ya falleció sin verla, y creo que me pasará lo mismo”, expresó con frustración.
El empresario recordó que durante la pandemia se realizaron mejoras sustanciales en el acceso a Cahuachi, aunque el costo fue elevado y asumido por los mismos residentes. Asimismo, denunció que personas inescrupulosas arrojan residuos sólidos a lo largo del trayecto, empeorando las condiciones de la vía. Ante esta situación, pidió a las autoridades municipales sancionar a los responsables y colocar letreros que adviertan sobre estas prácticas ilegales.
En una reciente actualización del proyecto, Omar Vilchez, gerente municipal de Nasca, quien enfrenta un proceso administrativo por un incidente con una trabajadora, anunció que la municipalidad ha avanzado en la documentación necesaria, como el expediente técnico de la carretera. Aseguró que el Gobierno Regional de Ica ha mostrado disposición para financiar el proyecto, cuya entrega se prevé para 2025.
Verne y otros habitantes han manifestado su preocupación por la falta de acción ante la creciente acumulación de basura en la zona. Según ellos, el turismo en Cahuachi, un sitio arqueológico de gran valor, podría verse afectado negativamente si no se toman medidas para limpiar y preservar el área.
A medida que pasan los años, la carretera a Cahuachi sigue siendo una deuda pendiente para la región, afectando tanto el desarrollo turístico como la calidad de vida de los residentes. Mientras tanto, los moradores esperan que esta vez las promesas se materialicen y la tan esperada carretera a Cahuachi finalmente se convierta en una realidad que impulse el desarrollo local y el turismo en la región.