Los desbordes en diversos tramos del río Aja, que sorpresivamente aumentó su caudal, causó la desesperación de algunos agricultores de la margen derecha, quienes nada pudieron hacer ante la arremetida de las aguas que arrasaron con sembríos en los sectores de Aja, Curve y Llicuas, donde lamentablemente no se realizaron trabajos de defensas ribereñas.
Defensas ribereñas debilitadas
Igualmente, la madrugada de ayer las avenidas de agua en el río Aja, debilitaron peligrosamente las defensas de la margen izquierda a la altura de la urbanización Amaprovi, donde los vecinos manifestaron su temor ante las próximas avenidas de agua, que podrían ocasionar un desborde. En este lugar, increíblemente tampoco se realizó trabajos de descolmatación del río.
Los desbordes anegaron y sepultaron un pozo de la Municipalidad Provincial de Nasca, ubicado en la margen izquierda del río Aja, que era utilizado para extraer agua para el regado de parques y jardines. En el lugar quedaron atrapados en el fango las cisternas sin poder movilizarse para realizar sus actividades.
La lluvia en la quebrada de Socos también ocasionó un huaico en las Pampas de Nasca, a la altura del km 442, cerca al peaje, donde las aguas discurrieron por un dren. Sin embargo, parte de ella ocasionó un aniego en la Panamericana Sur, restringiendo el paso vehicular.