Criminales atacaron un albergue para mascotas, una ferretería y dos viviendas. Exigen que les paguen cupos para no continuar con explosiones. (Foto: Radio Ke Buena Virú)
Criminales atacaron un albergue para mascotas, una ferretería y dos viviendas. Exigen que les paguen cupos para no continuar con explosiones. (Foto: Radio Ke Buena Virú)

Organizaciones criminales perpetraron cuatro atentados con explosivos en las provincias de y Virú, declaradas en emergencia por inseguridad ciudadana.

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Terrorismo urbano

El primer ataque ocurrió a las 10 de la noche del último miércoles en el local de la fundación ‘Tus patas en mis manos’, que brinda refugio a perros callejeros. Este inmueble, situado en la calle Quito de la urbanización El Alambre, en Trujillo, fue atacado con un cartucho de dinamita a pesar de que se ubica a solo dos cuadras de la comisaría de ese sector.

Encargados de este establecimiento indicaron que delincuentes les exigen el pago de S/ 20 mil para que les permitan continuar rescatando animales en abandono.

Asimismo, en la manzana H, lote 8, de la urbanización trujillana Covicorti, hampones también sembraron el terror la madrugada de ayer cuando hicieron estallar un explosivo en la puerta de una vivienda. Este es el segundo ataque a esta casa en 12 días.

El agraviado, quien evitó identificarse para evitar represalias, cree que los extorsionadores se habrían equivocado, pues a pesar de haber sufrido dos atentados no recibieron cartas ni llamadas pidiéndoles dinero.

En la provincia de Virú también ocurrieron dos atentados. El primero se registró a las 3:15 a.m. en la ferretería Mía, ubicada en la cuadra 20 de la avenida Virú, en el sector Puente Virú.

Según testigos, una persona llegó caminando y arrojó el explosivo, que estalló en el portón.

Los dueños del local indicaron a Radio Ke Buena Virú que hace días reciben llamadas extorsivas en donde les exigen el pago de cupos.

Asimismo, en el sector Víctor Raúl Haya de la Torre, delincuentes detonaron un cartucho en una vivienda de cinco pisos. El estallido afectó la puerta y las ventanas de la casa, en donde se alquilarían habitaciones.