Empresaria denunció la extorsión y la Policía le tendió una celada a los presuntos delincuentes. Grande fue la sorpresa de los agentes al descubrir que eran alumnos.
Empresaria denunció la extorsión y la Policía le tendió una celada a los presuntos delincuentes. Grande fue la sorpresa de los agentes al descubrir que eran alumnos.

Sorprendidos quedaron los agentes del Departamento de Investigación Criminal (Depincri) al descubrir que alumnos de una importante institución educativa de la provincia de Sánchez Carrión formarían parte de una presunta banda delincuencial que estaba extorsionando a una empresaria de la zona.

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Según denunció la agraviada, que por temor a represalias se identificó con las iniciales F.J. B. (45), el 10 de diciembre empezó a recibir llamadas de personas desconocidas que le exigían S/ 25 mil para no atentar contra ella y su familia.

PIDE AYUDA

A pesar del miedo que sentía, la empresaria decidió denunciar la extorsión en la Policía. Fue así que en coordinación con la agraviada y la Fiscalía se le tendió una celada a los maleantes. La víctima fingió aceptar las exigencias de los facinerosos y acordó entregar el dinero.

Tras coordinar el lugar exacto en donde se haría la entrega del “cupo”, un policía simuló ser familiar de la mujer y llegó hasta el punto indicado por los maleantes: el portón de un centro educativo. En ese lugar se dejó una bolsa con parte del dinero y los policías, escondidos cerca de la zona, esperaron hasta que vieron que una mano salió por debajo del portón y agarró el paquete.

De inmediato ingresaron al colegio y tras coordinar con las autoridades del plantel, se vieron las imágenes de las cámaras de vigilancia y se descubrió que fue el alumno de iniciales D.E.V.A. (14) quien recogió la bolsa. Al ser interrogado dijo que su compañero de iniciales D.H. G. (15), quien no había asistido al colegio, le había pedido que tome el dinero que dejarían en el portón.

La Policía llegó hasta la casa del segundo alumno y tras ser intervenido e interrogado, confesó que su amigo Y.D.S. A. (17) fue quien le solicitó que busque a alguien para recoger un paquete que dejarían en el portón del colegio. Este último también fue detenido horas después.

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