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Mediante un comunicado, la red de Colegios Profesionales de Lambayeque pidió que la Gerencia Regional de Salud (Geresa) modifique su plan ante la falta de camas UCI y médicos intensivistas.
Aunque el número de contagios ha disminuido en las últimas semanas, recomiendan que Essalud no desactive los hospitales blancos que se instalaron en Chiclayo y Ferreñafe.
PROPUESTAS POR CASOS
En el último trimestre del año, el mayor número de contagios por Covid-19 se registró en agosto con 4968 pacientes positivos.
Del 1 al 25 de setiembre, la cifra de nuevos casos se redujo a 3488, algo que el Colegio Médico ha reconocido como una notable disminución de contagios en la región.
Sin embargo, el decano de este colegio profesional, Manuel Soria Alvarado, advirtió que la principal dificultad sigue siendo el ingreso de pacientes graves de Covid19 a las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) donde no hay camas disponibles y se requiere más especialistas.
“No debemos bajar la guardia porque está el riesgo de una segunda ola de rebrote en octubre, por la mayor salida de personas que han estado en cuarentena. El nivel hospitalario tiene que estar preparado para recibir este probable aumento de casos”, explicó el galeno.
Hasta el momento, según precisó, hay una lista de entre 8 a 10 pacientes graves de Covid19 que están a la espera de una cama UCI además del ingreso de casos complejos de otras regiones como Amazonas y Cajamarca que requieren hospitalización urgente.
En ese contexto, el Consejo Regional de decanos de los Colegios Profesionales de Lambayeque (Conredes) ha exhortado a Geresa a cumplir con el fortalecimiento del primer nivel de atención para contener el contagio.
La decana del Colegio de Enfermeras, Viviana Samillán Medianero, indicó que a la fecha no se han designado centros de salud de nivel I-3 y I-4 para que sirven como puntos de contención tal como recomendó Conredes y la propia Federación Médica.
Estos establecimientos servirían para que “los pacientes con síntomas de Covid-19 o que son detectados por la comunidad reciban terapia de oxigenación y (su salud) no se agrave”.
“No se han implementado ni siquiera con equipos, materiales y camas. Presupuesto y dinero hay. Lo ideal es que el paciente no llegue directamente a UCI”, agregó la decana.
Adicionalmente, Conredes advirtió que se estaría evaluando desactivar los hospitales blancos instalados en Ferreñafe y en el hospital Luis Heysen Incháustegui debido a que tienen menos pacientes y a los costos de operación y mantenimiento que les demanda.
Al respecto, Soria Alvarado precisó que estos espacios son indispensables si el número de casos positivos se incrementa en octubre.
“Si se levantan los hospitales blancos eso significaría que hemos concluido la pandemia, y eso no es así. Se debe mantener la capacidad de respuesta sanitaria”, enfatizó.
