Hace unas semanas, el médico Jhonny Guabloche denunció que la organización criminal “Los Gallegos del Tren de Aragua” le exige la cantidad de 50 mil soles para no matarlo. Sin embargo, no es el único ciudadano que acude ante la Policía Nacional del Perú (PNP) en un intento por obtener protección.
De acuerdo con información a la que accedió Correo, se estima que en el Perú cada 24 minutos se denuncia un caso de extorsión.
La cifra es preocupante si se toma en cuenta que no están incluidos aquellos que no denuncian por temor.
DETALLES
Los datos obtenidos por Transparencia de la PNP dan cuenta de la cantidad de denuncias que interpusieron ciudadanos en cada región entre los meses de enero y agosto de este año (ver infografía).
Las denuncias registradas en los meses de enero (1735), febrero (1735), marzo (2030), abril (2086), mayo (1789), junio (1482), julio (1604) y agosto (1699) suman un total de 14,220.
Entre enero y agosto han transcurrido 243 días, lo que en promedio establecen 59 denuncias por extorsión al día a nivel nacional, es decir, que cada 24 minutos una persona se encuentra en una comisaría para denunciar un delincuente que le exige una cantidad de dinero a cambio de no atentar contra su negocio, familia o su propia vida.
Las regiones que concentran el mayor número de denuncias son Lima (5708), La Libertad (3469), Piura (1359), Lambayeque (553), Callao (441) e Ica (413).
La cantidad de denuncias colocadas en esas seis regiones suman 11,943, es decir, que concentran el 84% de las denuncias a nivel nacional.
Otro dato no menor es que entre enero y agosto de 2023 se registraron 13,648 denuncias, mientras que en 2024 en el mismo período se reportaron 14,220 denuncias.
Es decir, este año se han registrado 572 denuncias más.
LA CAPITAL
La región donde se concentra el mayor número de denuncias del período enero - agosto es Lima.
En Lima Metropolitana se han registrado 4937 denuncias distribuidos de la siguiente manera: Santa María del Mar (1), Punta Hermosa (5), Punta Negra (5), San Bartolo (8), Pucusana (13), Magdalena del Mar (15), Santa Rosa (16), Pueblo Libre (24), Miraflores (26), Chaclacayo (28), Ancón (29) y Cieneguilla (31).
En un segundo grupo están las denuncias de Barranco (34), Breña (34), Lince (36), Surquillo (36), San Borja (37), San Isidro (41), San Luis (41), La Molina (43), San Miguel (47), Jesús María (55), El Agustino (65), Santa Anita (68), Lurín (74) y El Rímac (96).
Entre los distritos que superan las 100 denuncias se encuentran: Pachacámac (104), Lurigancho - Chosica (135), La Victoria (137), Santiago de Surco (152), Independencia (156), Puente Piedra (163), San Juan de Miraflores (166), Carabayllo (170), Chorrillos (175) y Villa María del Triunfo (178).
Finalmente, está el grupo donde se reporta el mayor número de denuncias como San Martín de Porres (217), Los Olivos (224), Villa El Salvador (237), Ate (245), Comas (328), Cercado de Lima (460) y San Juan de Lurigancho (782).
ANÁLISIS
Sobre las extorsiones en el Perú, el criminólogo Nicolás Zevallos señaló que no es un fenómeno nuevo, pues existen antecedentes de que es un problema serio. Sin embargo, en los últimos años el problema se ha fragmentado.
“Pasa que no solo se extorsiona al gran empresario, sino a los pequeños negocios, a los emprendedores, a quienes tienen una bodegas, pequeños locales. Ahora te amenazan por siete soles con un arma o te matan”, precisó.
En diálogo con Correo, el experto en crimen organizado, delito urbano y estudios policiales, consideró que “hace rato” se cruzó en el punto crítico de esta situación.
Mencionó que aunque se haya declarado un estado de emergencia en varios distritos, de todas maneras se han reportado asesinatos por extorsiones, porque no se están tomando las medidas correctas.
Desde su punto de vista, la Policía debe coordinar con la Fiscalía para buscar a los autores del delito, pero también es importante evaluar la sobrecarga que existe en las instituciones, lo que genera una incapacidad de reacción.
Entre las prácticas que recomendaría aplicar para luchar contra la extorsión, Zevallos recomendó al equipo “Águila Negra”, el grupo de agentes policiales del Departamento de Seguridad de Bancos.
“Es una unidad de seguridad que trabaja con la Asociación de Bancos del Perú y tienen como labor custodiar la seguridad de los bancos. Antes habían robos en bancos, pero ahora se pasó a cero la incidencia”, apuntó.
También recomendó a la División Antisecuestros de la Policía que tiene una respuesta eficiente.
Otra medida que sugirió es realizar megaoperativos para desarticular organizaciones criminales en un trabajo coordinado con la Fiscalía, como se hacía hace años.
“Los dos puntos mencionados son ejemplos de que la Policía puede trabajar muy bien, porque se le otorgan capacidades”, dijo.
Sobre las denuncias que aparecen vinculadas a Policías implicados en hechos ilícito o que incluso trabajan de la mano con extorsionadores, el criminólogo refirió que en la Policía se puede hacer una evaluación de los integrantes que participan de los megaoperativos.
“Se les puede monitorear de manera continua, capacitarlos. Esto requiere de un trabajo intenso, pero a corto plazo para trabajar con un equipo de manera eficiente”, agregó.