:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/36XKBBVSXNAEHPEZTF4JIKHW7E.jpeg)
Desde que inició el estado de emergencia por la COVID-19, cerca de 45 niños y adolescente con cardiopatías congénitas de Lima y diversas regiones del Perú salvaron sus vidas tras ser sometidos a cirugías por médicos especializados del Instituto Nacional de Salud del Niño San Borja.
La doctora Stella Lucena Betancourt, jefa de Cardiología, indicó que los especialistas de cardiología y cirugía cardiovascular operaron de emergencia a menores de edad desde los tres días de nacido hasta adolescentes de 13 años.
Entre ellos figura la bebé Abdiel, de 2 meses de vida, procedente de Trujillo que fue sometida a una cirugía compleja a corazón abierto debido a su diagnóstico “drenaje venoso anómalo pulmonar obstructivo total – hipertensión pulmonar”, un defecto poco común que se caracteriza por la ausencia de conexión directa entre todas sus venas pulmonares y la aurícula izquierda del corazón, y que provocaba dificultad respiratoria en la bebé.
El equipo multidisciplinario de cardiología y cirugía cardiovascular procedió a una cirugía correctora de drenaje venoso anómalo pulmonar que culminó con éxito.
Asimismo, destacó la labor crucial de equipo de Cardiología en esta pandemia ya que se encarga de evaluar a los niños con diagnóstico de covid-19, con el fin de identificar alguna falla cardiaca o daño de los vasos coronarios que pueden desencadenar secuelas graves en la población pediátrica como el síndrome multisistémico inflamatorio pediátrico o kawasaki.
En esa pandemia, el servicio de cardiólogos fue el primero en habilitar la atención virtual, logrando realizar más de 1600 telemonitoreos a los niños de las diversas regiones del país.
“A pesar de la distancia, los cardiólogos seguimos de la mano con los pequeños pacientes con consultas virtuales, presenciales y monitoreo en hospitalización”, resaltó.
En el marco del Día Mundial del Corazón, que se conmemora el 29 de setiembre, la Institución resalta la labor del equipo multidisciplinario conformado por cardiólogos, cirujanos cardiovasculares, anestesiólogos cardiovasculares, intensivistas y enfermeras que se encargan del abordaje de las cardiopatías congénitas, logrando que en estos años aumente el pronóstico de vida de los pequeños pacientes y hoy realiza la evaluación y monitoreo de los niños con covid-19.
VIDEO RECOMENDADO
Pilar Mazzetti ante posible rebrote de COVID-19: “Debemos prepararnos para ello”
