Los artefactos pirotécnicos conocidos como “rascapiés" suelen ser ingeridos por los niños, quienes lo confunden con alguna golosina debido a su llamativa forma, tamaño, color y, sobre todo, por su “sabor dulce”. El Ministerio de Salud (Minsa) refiere que su ingesta causa vómitos y intenso dolor abdomina, entre otros daños que pueden poner en riesgo la salud y la vida de los menores.
La responsable de la Unidad Funcional de Atención a Personas Expuestas a Metales Pesados y Otras Sustancias Químicas del Minsa, Tania López, alertó que otros de los síntomas es la coloración amarillenta de la piel (ictericia), trastornos neurológicos como sueño, confusión, agitación y disminución de la presión sanguínea y sangrado.
“Los rascapiés contienen fósforo blanco, que es un veneno altamente tóxico para las células del organismo, especialmente el hígado. De modo que si un niño o niña ingiere este producto puede sufrir una severa intoxicación, lo que puede poner en riesgo su vida o dejar secuelas graves por los daños causados”, expresó.
Artefactos pirotécnicos
La especialista recomendó a los padres a promover el uso responsable de los artefactos pirotécnicos. “Los productos pirotécnicos no son juego de niños y, por ende, deben ser manipulados siempre por adultos para evitar que sufran accidentes”, manifestó.
Frente a este peligro, López Zenteno hizo un llamado a la comunidad en general y a los padres de familia para que tomen los recaudos necesarios para evitar que estos pirotécnicos estén al alcance de los niños y niñas, debiendo realizar una mayor vigilancia a sus menores hijos.
“Las fiestas de Navidad y Año Nuevo son propicias para el encuentro familiar, por lo que se deben tomar medidas preventivas en nuestros hogares para evitar el mal uso de artefactos pirotécnicos”, concluyó.