El ministro de Relaciones Exteriores, Allan Wagner, dijo este lunes que las vacunas contra el COVID-19 enviadas fuera del ensayo clínico fueron ofrecidas por el laboratorio chino Sinopharm para proteger al personal que realizaba los ensayos clínicos de sus dosis, en las universidades Cayetano Heredia y San Marcos.
NO DEJES DE LEER: “Cara Cortada” podría recibir cadena perpetua por asesinato de extranjero en Trujillo
Wagner Tizón sostuvo que este ofrecimiento formal fue recibido por el embajador del Perú en el país asiático, enviada a la cancillería y finalmente aprobado en coordinación con el Ministerio de Salud (Minsa).
“Sinopharm ofreció vacunas para el personal de los ensayos clínicos. Esto fue recibido por nuestro embajador y luego pasó a cancillería. Este ofrecimiento fue aceptado por la [universidad] Cayetano y Minsa. El Minsa señaló la necesidad de recibir 2.000 dosis”, expresó en la Comisión de Relaciones Exteriores.
“Sinopharm, según sus ofrecimientos, envió las dosis a la [universidad] Cayetano, que las recibió y luego dispuso distribuirlas. Estas vacunas llegaron al Perú como consecuencia de un ofrecimiento, se buscaba proteger al personal que trabajaba en el proyecto clínico. Además, se señaló que esto se haría solo con el permiso del Gobierno, el cual se dio”, aseveró.
Cabe indicar que esta versión no coincide con lo dicho por la presidencia del Consejo de Ministros, Violeta Bermúdez, quien afirmó que fue la Cancillería la que pidió al laboratorio chino que envíe vacunas para su personal.
“En estos días nos hemos enterado a raíz de la vacunación del expresidente (Martín Vizcarra) que, además de este paquete de insumos que vino para los ensayos clínicos llegó un conjunto de 2.000 dosis solicitadas por cancillería con la conformidad del Ministerio de Salud (Minsa) para los equipos de investigación vinculados a los ensayos clínicos”, aseveró Bermúdez a la Comisión Especial COVID-19 del Congreso.
MIRA: Rescatan cuerpo de joven huanuqueño lanzado desde un puente en Colombia
En cuanto a la distribución de vacunas en el Ministerio de Relaciones Exteriores, Wagner explicó que una vez que llegaron las dosis al sector no hubo una disposición oficial para definir qué funcionarios las recibirían, sino que se trató de decisiones personales. Precisó que serán las investigaciones las que determinen responsabilidades específicas por este hecho.
Sobre la posibilidad de que se revele el contrato firmado con Sinopharm, el canciller explicó que existen cláusulas de confidencialidad. “No tengo presente los plazos de confidencialidad. Es algo que hay que analizar para ver cuándo se puede hacer público el contrato. No debe exceder de 10 o 12 años”, dijo.
TU CANDIDATO EN UN MINUTO
En alianza con: