Brenda Silupú: “La exoneración del IGV no es una medida acertada”

Desde el 1 de mayo hasta el 31 de julio estará vigente la exoneración del IGV a cinco productos de la canasta básica familiar: el pollo, huevos frescos, azúcar, pastas alimenticias y pan. Sin embargo, la medida no se refleja en los mercados de la región Piura.

VER MÁS: Piura: Nuevo retiro de la AFP no beneficiará a los más pobres

¿Por qué el precio de los productos de la canasta básica no han disminuido?

Cuando se realiza una política tributaria, como el IGV, tienen que analizar el contexto y entorno del país. El 75% es informal, entonces son las que llegan al consumidor final, y ellos no pagan impuestos, no determinan su precio de venta considerando el IGV. El hecho de aplicar una medida tributaria en ese sentido, no va a tener el impacto esperado. Tenemos solo un 25% de empresas que tienen RUC para impuestos, pero hay un 10 o 15% de empresas que son naturales del RUS, que emiten boleta y declaran pago fijo, el impacto del IGV puede repercutir en un grupo pequeño de empresas, estamos hablando de 10 a 15% de las que están formalizadas y se encuentran en régimen general o especial. El IGV que se ha dado es al precio del producto final, por lo tanto esta perjudicando a formales que no pueden deducir el crédito fiscal.

Pero la mayor parte de la población no tiene acceso a este pequeño grupo de 10 a 15% de empresas, sino a los informales.

La población no siente la medida tributaria establecida, es una medida de corto plazo porque tiene vigencia de un periodo determinado, el impacto debe ser inmediato cuando se establece una medida tributaria en ese sentido.

¿Qué alternativas se pudieron haber dado?

La informalidad es un problema estructural que vivimos desde hace muchos años, formalizar en cortísimo tiempo es difícil, en ese sentido hubiese sido un subsidio o bonos que se han estado dirigiendo especialmente a familias de menos recursos que han perdido empleo, hubiese sido una medida más directa y hubiese compensado en algo la subida de precios, no solo el precios de la canasta, sino de todo lo que ha subido, como la gasolina.

En cuanto a la gasolina, se reportó una diminución, pero luego el precio subió.

Es un tema que no solo nos está afectando a nosotros, sino a otros países, fue una medida temporal, pero otra vez hubo un incremento que va a continuar en los próximos meses, viendo el panorama interno se tendría que ver qué políticas más directas y eso repercute en todo como precios, productos, etc, ahora que estamos con una inflación que sobrepasa la histórica, la que hemos presentado en marzo y abril, la tendencia en mayo es que también va a registrar una subida de precios.

El precio del pollo vivo no está incluido en la norma que ha emitido el Gobierno...

Hay varios factores, por ejemplo el uso de insumos, se ha incrementado de precio y eso va a repercutir en el precio del pollo, entonces todos los insumos que se usan en el extranjero para alimentar al pollo va a repercutir en el precio final y el pollo vivo es el que llega al sector informal y son ellos los que se encargan de subir (de precio). La medida del IGV no ha sido una medida acertada, el impacto que va a tener el IGV es en la baja recaudación tributaria que va a tener el gobierno.

Considera que se trata de una medida facilista o no planificada...

Creo que ha sido algo rápido simplemente para tranquilizar a la población, no se ha elaborado un análisis técnico para ver las consecuencias que pudo haber tenido, requiere que los políticos analicen el contexto y no simplemente guiarse por temas temporales o presiones de ciertos sectores.

Hay un panorama sombrío por los conflictos sociales...

La situación es difícil, por eso de alguna manera se necesita precisión en las inversiones porque hay mucha incertidumbre, no se ve reactivación de la economía, y los precios van en subida.