El juez del Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria Especializado en Corrupción de funcionarios de la Corte de Justicia de Piura, Christian Barnard Azabache Vidal, cuestionó al fiscal Wilson Aliaga Ángulo porque tipificó el delito como concusión y no como cohecho en el caso del rector Santos Montaño Roalcaba.
“Porqué no calificó esto como cohecho, si su resolución de detención domiciliaria ya se avizoraba elementos más precisos para cohecho que para concusión”, cuestionó Azabache a la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Piura durante la audiencia de detención domiciliaria y comparecencia con restricciones contra el rector de la Universidad de Piura, Santos Montaño Roalcaba y otros por el delito de concusión.
“El MP está convencido que es concusión porque hay una exigencia que venía por parte del rector al señor Ojeda Reyes....el señor rector no tiene nada que ver con el tema de pagos”, respondió Aliaga.
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“¿El rector no es superior jerárquico de la señora Fátima?...esta judicatura discrepa de esta excepción”, subrayó Azabache.
El juez, también cuestionó a la fiscalía si realmente había verificado la gravedad de la enfermedad de Santos Montaño, pues esta misma excusa usó en el proceso que se le sigue por el presunto descalfo a la UNP por las maestrías dictadas en el Ecuador.
“En ese proceso cuando se debatió su prisión preventiva expuso el mismo argumento de salud, pero aún así ha seguido laborando con su cargo de rector...por un lado se dice estoy enfermo y por el otro se ejerce la función pública”, subrayó Azabache.
El fiscal, subrayó que tanto Juan Nima Villaseca, asesor del rector, y Fátima Sandoval Oliva, gerente general de Administración de la UNP, asumieron su responsabilidad en los hechos y firmaron el acuerdo provisional de terminación anticipada, de esta manera aceptando el cargo.
