El área de almacén del hospital de la Amistad Perú Corea II-2 Santa Rosa en Piura no presta las garantías para almacenar balones de oxígeno medicinal, lo que pone en riesgo la seguridad de los trabajadores, usuarios y de los mismos equipos.
Deficiencias
El informe de Visita de Control N°10263-2021-CG/GRPI-SVC de la Contraloría de la República, advierte que la entidad estaría incurriendo en 5 faltas para mantener en buen estado los equipos y la seguridad de las personas que laboran en este nosocomio. El informe fue realizado entre el 8 al 16 de abril de 2021.
El documento detalla que el almacenamiento de balones de oxígeno medicinal no cumple la normativa técnica generando el riesgo de accidentes y deterioro de los mismos, afectando no solo la seguridad de los trabajadores, sino de los usuarios que acuden al establecimiento de salud.
Durante la visita de inspección física realizada el 8 de abril de 2021 al almacén del hospital, la Contraloría observó que en los pasillos de circulación de personal se encuentran almacenados balones de oxígeno medicinal sin soportes ni medida de sujeción.
Esto lleva a que los balones con el insumo para los pacientes con coronavirus se encuentren en contacto directo con el suelo.
Asimismo, no cuentan con caperuzas o capuchones que mantengan segura la válvula de control. Esta situación genera el riesgo de accidentes y deterioro de los balones de oxígeno.
El informe también detalla que hay una incorrecta ubicación de extintores en el área de almacén del hospital, lo cual no garantiza su utilización oportuna ante un eventual incendio, lo que podría afectar la integridad física del personal y de los bienes almacenados.
El informe precisa que el área cuenta con un extintor de polvo químico seco y otro de agua presurizada, los cuales se encontraban ubicados sobre un refrigerador, al costado de la puerta de ingreso del área administrativa del almacén, rodeados de otros objetos.
Como se conoce, estos equipos deben estar ubicados en áreas accesibles y visibles en todo momento, utilizando, de ser el caso, señalizaciones en las paredes que indiquen su ubicación, además de estar instalados en sus portaextintores, ganchos, colgadores o gabinetes.
De otro lado, la Contraloría advierte que el almacenamiento de pedestales para aspiraciones de secreciones y medicamentos se encuentran en cajas de cartón fuera del almacén y a la intemperie y en algunos casos en contacto directo con el piso.
Es así que las cajas que contienen lactato de ringer y poligelina 3.5% se encuentran apilados en columna superior a 6 cajas, pese que en las descripciones contenidas en las cajas muestran un apilamiento máximo de 6 cajas, en tanto se evidencia que están en contacto directo con el suelo, a esto se agrega que los desechos de cartones, parihuelas, cajas y otros están cerca de la puerta de ingreso del área del almacén.
Esto lo pone en riesgo ya que el manual de “Buenas prácticas de almacenamiento de productos farmacéuticos, dispositivos médicos y productos sanitarios en laboratorios, droguerías, almacenes especializados y almacenes aduaneros”, señala que las instalaciones deben estar diseñadas para ofrecer la máxima protección contra la entrada de contaminantes, también por los productos farmacéuticos, dispositivos médicos y productos sanitarios deben ser colocados sobre tarimas o parihuelas, nunca directamente sobre el piso y separados de las paredes y techos, de modo que facilite la limpieza e inspección de lo expuesto.
Entre otras observaciones, la entidad de control precisó que el almacén del hospital al exceder su capacidad crea peligro en el personal, en la conservación y custodia de los bienes almacenados. Esta situación permite que los elementos se encuentren expuestos en los corredores y pasillos del establecimiento. Además, al estar por encima de las estanterías de metal pueden caer y malograrse o afectar la integridad de los trabajadores.
Otra de las deficiencias que reportaron los auditores durante la visita de inspección, es que el nosocomio cuenta con 20 equipos de asistencia respiratoria, 17 que fueron donados por el Ministerio de Salud (Minsa) en los meses de junio y julio del 2020 a la Dirección Regional de Salud (Diresa) Piura, sin embargo, los 17 equipos presentan deficiencias y limitaciones que no hacen posible su uso para el tratamiento de pacientes con COVID-19.
Mientras tanto, estos no cuentan con mobiliario adecuado y materiales necesarios para garantizar su mantenimiento.
El informe detalla que el director del hospital Santa Rosa, Edwin Chinguel, solicitó al director de la Dirección Regional de Salud de Piura, José Nizama, arreglar estos equipos y que sean distribuidos a otros centros de salud de la región donde atiendan a pacientes con menor complejidad de riesgo, pero no se ha hecho.
Intentamos comunicarnos con el director del hospital Santa Rosa, Edwin Chinguel Pasache, para ver qué medidas tomarán frente a esta situación, sin embargo, no obtuvimos respuesta alguna.
Lo mismo ocurrió con el director de la Diresa, José Nizama Elías, ya que los equipos de asistencia respiratoria siguen malogrados, mientras que los pacientes con COVID-19 siguen esperando para salvar sus vidas.
La Contraloría espera que se subsanen estas deficiencias en dicho hospital para garantizar el buen uso de los equipos y una buena atención a los pacientes que sufren de la enfermedad.