Estas prácticas irresponsables dejaron, el año 2016, más de cuatro mil hectáreas de bosques naturales, pastizales, plantaciones de pino y otras especies forestales, quemadas en las provincias de Huancabamba y Ayabaca.
Estas prácticas irresponsables dejaron, el año 2016, más de cuatro mil hectáreas de bosques naturales, pastizales, plantaciones de pino y otras especies forestales, quemadas en las provincias de Huancabamba y Ayabaca.

Con el objetivo de contar con los procedimientos y recursos para mejorar las , el Gobierno Regional, a través de la Oficina Regional de Seguridad y Defensa Nacional, con la asistencia técnica del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR), trabaja en la elaboración del primer “Plan de contingencia ante incendios forestales 2022″.

El Centro de Operaciones y Emergencia Regional (COER) de la Oficina Regional de Seguridad y Defensa Nacional es la instancia que lidera y coordina la elaboración de este instrumento de gestión, con las instituciones que integran el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (SINAGERD), como el Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción del Riesgo de Desastres (CENEPRED), la Dirección Desconcentrada del Instituto Nacional de Defensa Civil (INDECI) y el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (SENAMHI).

Asimismo, se viene trabajando al respecto con la Dirección Regional de Agricultura, la Gerencia Regional de Recursos Naturales, la I Comandancia Departamental de Bomberos (Piura) y las comunidades campesinas afectadas o ubicadas en zonas vulnerables de la región.

En Piura, los incendios forestales se originan principalmente por las malas prácticas de quema de pastizales y rastrojos, así como por la extracción no controlada de miel de abejas nativas. Los pobladores queman la “maleza” como costumbre para acondicionar terrenos e instalar campos de cultivo agrícolas, con el objetivo de que crezca nuevo pasto y supersticiosamente para atraer las lluvias.

Estas prácticas irresponsables dejaron, el año 2016, más de cuatro mil hectáreas de bosques naturales, pastizales, plantaciones de pino y otras especies forestales, quemadas en las provincias de Huancabamba y Ayabaca.

Cabe recordar que, en el departamento de Piura, predominan los bosques tropicales estacionalmente secos, en los cuales, debido a las lluvias por el Fenómeno de El Niño, los bosques se recuperan y a su vez se forma una nutrida zona de pastizales, que constituye una oportunidad para la regeneración natural y reactivación de la actividad pecuaria (ganado y apícola). Sin embargo, este escenario representa también un peligro en caso de incendios forestales, porque la vegetación seca es un combustible altamente inflamable.

El SERFOR recuerda que, provocar incendios forestales y realizar quemas de los recursos forestales que forman parte del patrimonio son faltas “Muy Graves”, según la Ley N° 29763, Ley Forestal y de Fauna Silvestre. La sanción por este tipo de infracciones oscila entre 0.1 hasta las 5000 Unidades Impositivas Tributarias (UIT), determinadas según criterios de gradualidad. Por su parte, el Código Penal sanciona con pena privativa de la libertad de 4 a 6 años.

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