Ante una inminente tercera ola y la posible presencia de la variante India o Delta en Piura, Contraloría detectó problemas con el suministro del oxígeno medicinal debido a fallas técnicas y falta de un sistema de respaldo tanto en la planta de oxígeno como en la operación del isotanque cedido al hospital Santa Rosa de Piura. Y en las instalaciones principales del nosocomio, la Contraloría detectó problemas con las conexiones de agua, que estaban ocasionando fugas y filtraciones en el techo de la infraestructura.
El isotanque
Los pacientes COVID-19, que se atienden en las carpas del hospital Santa Rosa, podrían tener problemas con el suministro del oxígeno medicinal debido a fallas técnicas y falta de un sistema de respaldo, tanto en la planta de oxígeno como en la operación del isotanque.
La voz de alerta provino de la propia Contraloría General de la República, luego de una visita que hizo entre el 26 de mayo y el 4 de junio último, a la explanada del excampo ferial, donde funcionan las carpas para la atención de pacientes afectados con el nuevo coronavirus.
Según se advierte en el informe de control N° 003-2021, la planta de oxígeno que se donó hace unos meses, funciona sin cumplir los requisitos técnicos mínimos de operación y, además, carece de un sistema alterno de generación de energía en caso suceda una interrupción del fluido eléctrico.
La planta fue una donación de una empresa minera y sirve para la producción diaria de unos 45 a 48 balones de oxígeno al día.
De acuerdo a la norma técnica, la planta debe funcionar sobre una plataforma de concreto para aminorar el impacto de las vibraciones de la operación; debe contar con una canaleta de desfogue de agua y, por último, no puede operar cerca de cableado de energía.
De otro lado, los balones de oxígeno se encuentran a la intemperie, sin ningún tipo de protección para evitar un daño.
Sin embargo, para los auditores, el hecho que generó más preocupación es que en la inspección no se halló ningún grupo electrógeno que funcione como respaldo ante un súbito corte de energía.
Esto ocurre a pesar que se trata de un servicio crítico y que puede significar la vida o la muerte de pacientes con insuficiencia respiratoria.
“Se evidencia que el hospital Santa Rosa […] no viene cumpliendo con las condiciones técnicas mínimas para la implementación de plantas de oxígeno en el contexto de la emergencia sanitaria ni con la normativa de almacenamiento de balones de oxígeno medicinal para la atención de pacientes COVID”, se lee en el informe.
Sin respaldo
Si bien estas fallas podrían quedar atenuadas porque la planta se donó hace pocos meses, lo que sí sería muy grave es lo que sucede con el isotanque cedido en alquiler hace más de un año, el cual está conectado directamente con las camas de pacientes a través de 48 puntos.
La principal falla es que el sistema de respaldo de emergencias sería insuficiente para responder ante una emergencia, como es la falta del insumo medicinal.
Una falla similar se habría detectado con el respaldo del isotanque del hospital de Essalud de Talara y lo cual le habría costado la vida de una docena de personas.
De acuerdo a la inspección del 26 de mayo, el isotanque solo tenía conectado 10 balones de oxígeno como respaldo ante una emergencia, cuando el diseño del sistema exige un total de 20 cilindros conectados que funcionen en caso se agote el insumo en el isotanque.
“El manifold del isotanque estaría a la mitad de su capacidad para atender la demanda de oxígeno medicinal gaseoso de los 48 puntos de la red de oxígeno que abastece las carpas COVID-19, ante alguna contingencia se pueda presentar en el suministro desde el isotanque”, refieren los auditores en su informe.
Otra deficiencia técnica es que los balones del sistema de respaldo se encuentran sin protección del sol, cuando la norma técnica refiere que no pueden estar expuestos a temperaturas mayores a los 30 grados.
Por estos motivos, la Contraloría considera que hay riesgo en la atención oportuna de los pacientes que dependen de la oxígeno terapia para seguir con vida.
Agua
Mientras esto sucede en las carpas, en las instalaciones principales del nosocomio la Contraloría detectó problemas con las conexiones de agua que estaban ocasionando fugas y filtraciones en el techo de la infraestructura.
Esto se evidencia en el informe N° 002-2021-OCI/5762-SCC realizado el 7 de junio del presente año por la Oficina de Control Interno (OCI) del Hospital de Apoyo I Santa Rosa de Piura.
Esto se evidenció en la visita que realizaron los auditores el pasado 27 de mayo a los ambientes de la Unidad de Servicios Generales y Mantenimiento del mencionado hospital, en la que observaron que la red de conexión principal y accesoria del suministro de agua potable tenía múltiples fugas e interrupciones en el suministro.
Al respecto, el jefe de la Unidad de Servicios Generales y Mantenimiento informó a los auditores que las conexiones de la red principal de aguas ubicadas en el techo aligerado del nosocomio fueron instaladas en el 2008 y que a la fecha ya cumplieron su vida útil; por lo que la mayoría de tuberías se encuentran deterioradas, necesitando un cambio general.
Agregó que la antigüedad de las tuberías, la exposición al sol y la presión del agua al ser bombeada genera la rotura de codos y tuberías, inundando parte del techo y debido a los trabajos de mantenimiento se corta el agua para los servicios de salud de atención a los pacientes.