:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/CIBSWUC7FRGN7BR2C2UYWPEE6Y.jpg)
De cinco disparos en diferentes partes del cuerpo fue asesinado por dos sicarios un estibador frente a la atónita mirada de su esposa. En otro caso, los delincuentes asesinan a dos amigos. Los tres fallecidos se registraron en la provincia de Sullana, en la región Piura.
El primer crimen ocurrió a las 11:30 de la noche del último domingo cuando el estibador, Franklin David Sánchez Abad (31), regresaba a su domicilio en compañía de su esposa y su cuñada, tras disfrutar de un baile social.
TAMBIÉN PUEDE LEER: Ofrecen S/ 15,000 para capturar al rector de la Universidad Nacional de Piura
Según las primeras informaciones policiales, el crimen ocurrió en circunstancias en que Sánchez Abad regresaba a su casa a bordo de su mototaxi en compañía de su esposa Carmen Estrada Luzón (29) y su cuñada, Claudia Estrada Luzón, luego de participar de un baile social en el local Simón Peña.
En ese momento fueron interceptados por dos hombres a bordo de una moto a la altura de la primera cuadra de la avenida Jaime Bardales del asentamiento Los Olivos de Sullana.
Uno de los delincuentes disparó cinco veces, sin mediar palabra alguna contra el estibador ante la atónita mirada de su esposa y cuñada. Los malhechores huyeron, luego que lo vieron caer el piso en medio de un inmenso charco de sangre con dirección hacia la carretera Sullana – Tambogrande.
Hasta el lugar de los hechos llegaron los peritos de la Oficina de Criminalística (Oficri) de Piura para que realice las pericias en la escena del crimen y recoja los casquillos de balas que dispararon los delincuentes.
MÁS ASESINATOS EN SULLANA
La noche de ayer, dos personas fueron asesinadas por delincuentes en la urbanización Nuevo Horizonte.
Las primeras investigaciones policiales indican que delincuentes armados llegaron en motos y dispararon a matar contra Darwin Jiménez Cueva y Cristhian Hurtado Villalta. A pesar que ambos fueron auxiliados y trasladados al Hospital de Apoyo I de Sullana, llegaron muertos.
