En los albores del año 1973, a una década de la creación de este pujante asentamiento humano de Santa Rosa, abrió sus puertas el colegio Perpetuo Socorro, convirtiéndose en un eje educativo para todo los jóvenes en el nivel secundario.
Muchos piuranos quizás, desconozcan que el colegio emblématico San Miguel tuvo un anexo de nivel secundario hace 51 años y que luego se convirtiera en el “Perpetuo Socorro”, que este año está celebrando sus Bodas de Oro.
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EL ANEXO
Corría el mes de marzo de 1972, cuando muchos alumnos matriculados en la Gran Unidad Escolar San Miguel, tuvo que recibir sus clases en un anexo en el Local Comunal de Santa Rosa. Aquí en aulas de esteras y tripley iniciaron el año con 7 aulas con 53 a 54 alumnos en cada una de ellas, con excelentes profesores al mando del director Oscar Gonzáles Gallo (+).
Muchos de los alumnos de diversos sectores de Piura y Castilla eran traslado al anexo en el ómnibus amarillo, al que llamaban el Ñato” y se entonaba el “amanece, amanece, amanece; amanece en el norte y el sur” con un corazón henchido de un sanmiguelino a carta cabal.
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LOGRO EDUCATIVO
Al año siguiente fue cambiado de nombre a Perpetuo Socorro al fusionarse el colegio de El Alto con el anexo sanmiguelino, dando paso al nombre con el que venía de lares talareños. La historia de este colegio se ha tejido con grandes esfuerzos y es grato recordar a todos aquellos que de una y otra manera contribuyeron al logro de lo que se vive en la actualidad
No podemos hablar de la historia de estos 50 años sin dejar de nombrar también a los educandos que hicieron posibles que estemos en un nivel muy superior en la educación piurana, gracias a los estímulos obtenidos como los 7 gallardetes a la eficiencia, y tanto logros. “La transformación dada ha costado mucho sacrificio, venciendo muchos obstáculos para satisfacer las necesidades que como institución educativa se merecía”, nos dice el director Gerardo Rufino.
