En la hora undécima los piuranos se volcaron a los mercados y centros comerciales, para adquirir el consabido regalo para los pequeños y para la preparación de los potajes para la Noche Buena.
Desde tempranas horas de ayer miles de personas buscaban en los puestos de ventas para adquirir lo necesario y celebrar por la noche el nacimiento del niño Jesús.
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TRAFICO
Aparte de esto, era lidiar con el transporte público donde entre motos lineales, taxis, ómnibus, mototaxis y hasta moto furgones las personas querías salir o entrar a los comercios. Las avenidas Grau, Sullana, Blas de Atienza y Vice, era imposible salir del atolladero, sino después de 20 minutos y eso era parte también por la falta de seguridad por parte de la Policía y Serenazgo.
En la agencias de viajes, cientos de personas llegaban desde la capital y otros lugares y los conductores armaban otro desorden con sus vehículos para recoger pasajeros. Como siempre los piuranos esperan la última hora
