El jefe zonal de Superintendencia Nacional de Control de Servicios de Seguridad, Armas, Municiones y Explosivos de Uso Civil (Sucamec), Roberto Tovar Ortiz, refirió que, desde el año 2017 al 2022, se han reportado 7 mil 739 armas como perdidas. “Muchas de ellas se han encontrado en organizaciones criminales de nuestro país”, advirtió.
En opinión del funcionario, esta situación se ha tornado, con el transcurrir de los años, mucho más crítica, debido a los vacíos que existe en la Ley N°30299, dispositivo que regula el uso civil de armas de fuego, municiones, explosivos, productos pirotécnicos y materiales relacionados. Una situación que merece ser revisada está referida al artículo 19 que dice: “El número de armas permitido para defensa personal es de hasta un máximo de dos, excepcionalmente se podrá conceder hasta tres…”. A continuación, señala: “El número de armas de fuego destinadas para caza…no están sujetas a límite alguno”.
Precisamente ante estos vacíos legales es que el Ejecutivo ha solicitado delegación de facultades al Congreso de la República para modificar la norma y así establecer mecanismos que permitan controlar situaciones adversas. “En varios casos, se han reportado armas, como perdidas, armamento que luego es utilizado por la minería ilegal, narcotráfico o la delincuencia común, tenemos que controlar esta situación”, sostiene Tovar Ortiz.
Dato: En el caso de la región Puno, 400 licencias para portar armas de fuego han vencido. En lugares como La Rinconada y la zona norte de la región, los delincuentes, en muchos casos, utilizan armas reportadas como perdidas o robadas.
