Los restos de Vanesa Bernedo Miranda (31) ya descansan en paz en el cementerio La Capilla de la ciudad de Juliaca. Un mar humano acompañó su último adiós, en medio del clamor de justicia por parte de familiares, amigos y compañeros de trabajo.
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Su madre, Concepción Miranda, entre lágrimas pidió caiga sobre los culpables todo el peso de la Ley y lamentó que, la entidad donde trabajaba su hija, haya únicamente ofrecido 5 mil soles, a manera de ayuda para cubrir los gastos del sepelio.