La quinua puneña, en especial la de producción orgánica, ha colocado al Perú en un sitial privilegiado en el mundo. Sin embargo, como producto bandera, aún queda un largo camino para darle el trato que merece. Un aspecto prioritario es trabajar en la estandarización del grano y la creación de una marca colectiva.
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Eusebio Chura Parisaca, presidente del a Mesa de Trabajo de la Quinua en la Región Puno, afirma que existen ciertos avances en cuanto a la estandarización. No obstante, es necesario fortalecer la organización de los productores y cooperativas.
Muestra de ello es la Cooperativa Agro Industrial (Coopain) Cabana, que está debidamente fortalecida y abastece del grano al mercado regional, nacional e internacional. Cuenta con la certificación de producto orgánico para vender a Japón, Estados Unidos y la Unión Europea.
Chura sostiene que hay otras cooperativas que están en ese proceso, pero existen empresas que han venido a distorsionar el modelo de organización. Es así que la quinua blanca que se comercializa a 4.30 soles por kilo, y la roja y negra a S/5, por ofertas mayores no suelen tener la acogida que se espera.
Falta de apoyo
Desde hace años desde esta mesa de trabajo se ha gestado la creación de la marca colectiva, pero el factor económico es determinante para trabajar en este proceso. El Gobierno Regional de Puno, así como el gobierno central, se han mostrado indiferentes ante este pedido de los productores.
Eusebio Chura señala que también se siente esa desidia en cuanto al apoyo para la entrega de abono orgánico (guano de isla) a través de Agrorural. Asimismo, piden que el proyecto Granos Andinos, que maneja un presupuesto de 23 millones, justifique su trabajo porque no ven resultados del mismo.
En la región Puno se siembran aproximadamente 37 mil hectáreas de quinua, mil 100 kilos por cada una. Coopain Cabana lidera la producción regional con 1200 hectáreas. Aunque parezca atractivo, en promedio solo el 15% de toda la producción sería de quinua netamente orgánica.
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Bajo consumo
El consumo percápita en el país es de dos kilos de quinua, cifra que para Chura es baja. Más importante que abastecer al mercado exterior, considera que es garantizar la seguridad alimentaria en el Perú.
Cadena
La Mesa de Trabajo de la Quinua trabaja con toda la cadena de valor del producto; es decir con los productores primarios, transformadores y comercializadores del “grano de oro” puneño.