Vecino de Jorge Paco informó existencia del pozo el 28 de diciembre

Ante el hallazgo de nuevas evidencias sobre el asesinato de Judith Machaca y Noemí Escobar, halladas en un pozo de La Yarada ha salido a la luz el ciudadano Willy Linares Centurión quien ha revelado que la información acerca de dicho agujero fue proporcionada a la Policía el 28 de diciembre y pese a ello los efectivos no acudieron para hacer una revisión minuciosa.

En entrevista con Correo hoy Linares contó que es vecino del padre del policía sospechoso del crimen de Judith Machaca, Jorge Aniceto Paco Cabrera, y que ambos tenían sus terrenos colindantes en la zona de La Yarada.

Junto a otros agricultores en el 2009 decidieron excavar dicho pozo, por el cual pagaron 800 soles metro, llegando hasta los 80. Al no encontrar agua lo dejaron abierto para que si un día necesitaran una nueva fuente pudieran seguir escarbando.

FUE ENTERRADO ENTRE EL 28 DE DICIEMBRE Y EL 11 DE ENERO

Sostiene que cuando fue preguntado por el suboficial Llacsa, les dijo de la existencia de ese pozo que aún estaba abierto y donde estaba ubicado, pero no hicieron nada. Recién el 11 de enero, cuando llegaron los policías de Lima, estos en menos de 48 horas encontraron el pozo, pero ya había sido enterrado.

Recordó que el padre de Judith, Gabino Machaca insistía en que intervengan el lugar pero los agentes locales se excusaban en que debían esperar los trámites judiciales.

Sospecha que los policías del Depincri en realidad estaban ayudando a Paco e hicieron mal el atestado que sirvió de base al expediente de la Fiscalía, el cual finalmente favoreció a que no se ordene su prisión preventiva. “La policía hizo un mal trabajo, todos deberían ser removidos, desde el que cuida la puerta”, enfatizó Linares, quien indicó que sigue apoyando en las investigaciones.